
Serena fue como todos los jueves por la mañana al mercado, pero ese día su vida iba a tomar un giro inesperado…
-ahí va el muchacho del apartamento de arriba. Pensó Serena y continuo caminando hacia la tienda de ropa.

-dime una cosa Catalina, ¿ese que paso recién es el chico nuevo del barrio?
-si señora Serena, así es, su nombre es Darien y es muy apuesto por cierto.
-si realmente es apuesto.
Serena volvió a su apartamento, almorzó, durmió la siesta, miro un poco de televisión, ceno y se dirigió a la habitación para descansar. Antes de acostarse observo fijamente un retrato de ella cuando tenía 26 años y pensó:

-daría mi vida por volver a ser como la del retrato, al fin y al cabo mi vida no fue más que trabajar y trabajar. Jamás he conocido el verdadero amor.

De repente Serena vio una luz brillante que surgía de la nada. Al mirar con atención pudo ver que se trataba de una bruja, si una bruja de verdad.

-¿pero quién eres tú?
-no importa quién soy o como me llamo, ya que esta será la primer y última vez que nos veremos.

Tras escuchar las palabras de la bruja, Serena percibió que alrededor suyo, surgían unas lucecitas muy brillantes y sintió como todo su cuerpo se paralizo.
-¿acaso voy a morir?
A la mañana siguiente…


Al abrir los ojos Serena se dio cuenta que algo había cambiado, se levanto y se observo en un espejo.
-¿pero qué es esto? ¿realmente soy yo? ¿acaso es posible?

Luego de mirarse en el espejo, recordó lo sucedido en la noche. Sin perder tiempo se vistió y salió al palier del edificio. Por un momento casi se olvida que Darien se había mudado justamente en el apartamento de arriba. Emprendió camino y decididamente toco la puerta.

Como nadie atendía y vio que la puerta estaba abierta, decidió entrar y sentarse en el sofá.
Continuará...







































