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La asombrosa saga galáctica

Escribe la historia de tu especie, desde sus inicios hasta las aventuras galácticas.

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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Uburian » 24 Jul 2011, 17:49

Muchas gracias Hero :D

Lo cierto es que estoy creando el último capitulo de entropía y galaxía, pero cuesta encontrar un final adecuado :D
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor galactichero » 24 Jul 2011, 18:37

Seguro que el final es que fue el mayordomo :mrgreen: Lo espero con ansia, Entropía y Galaxia me está molando mucho :wink:
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Grow » 25 Jul 2011, 03:27

mmmm.... no me aparecen las imagenes completas jaja...
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Uburian » 25 Jul 2011, 08:17

Tienes que abrir las imágenes en una nueva ventana :D
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Juchubao » 30 Ago 2011, 15:33

Como ya te dije, muy buen cómic, además es muy gracioso. =D>
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Uburian » 11 Sep 2011, 18:28

Aquí os traigo un capítulo completamente nuevo de TAGS. Este episodio sucede después de ¨El comienzo¨, ya que he decidido que los capítulos que escribí sobre Curion son no-canónicos :mrgreen: Espero que os guste :wink:

Atraídos hasta Curion

Caos, esa es la palabra adecuada para definir las aciones que determinan los entresijos que componen una comunidad tan grande que es capaz de poblar una galaxia de forma civilizada. El orden, la democracia, la justicia, el progreso... no son más que falsos términos empleados por aquellos que dicen dirigir el camino de la sociedad, bajo un manto de cordial simpatía, pero que tan solo piensan en su propio beneficio. La única forma de mantenerse alejado de ese torbellino de calamidades causada por la avaricia y la crueldad es intentar pasar desapercibido, una muy difícil empresa para todo aquel que intente emprenderla.

El planeta Curion nunca había llegado a llamar demasiado la atención en la comunidad galáctica, o mejor dicho, nunca había intentado destacar sobre los demás. A los ojos de casi la totalidad de la galaxia, este mundo carece de importancia, y aquellos que por algún motivo lo han llegado a conocer bien, lo han terminando olvidando. Son muy pocos, a parte de los propios Curions, los que han podido llegar a apreciar su autentica belleza.

Cualquiera que observara Curion desde una distancia adecuada no tardaría en darse cuenta de que un enorme continente se extiende por todo el planeta, una frondosa e irregular superficie dotada de una extravagante geografía; altísimas montañas nevadas y titánicos desfiladeros ocultos bajo la vegetación, que llegan ha recorrer de un lado a otro el continente. De todas formas, un análisis fotográfico extra-planetario no llegaría a captar, en todo su esplendor, las gigantescas galerías subterráneas y mares que atraviesan el interior de esta enorme masa de tierra.

Una exploración más detallada descubriría que las selvas del planeta, infestadas de voraces criaturas, son inadecuadas para cualquier asentamiento civilizado, ya que los feroces Kuk-to, los mayores depredadores de Curion, enormes criaturas aladas que sobrevuelan el mundo en busca de presas, arrasarían toda edificación que encontrasen en su camino.

Ante el descubrimiento de este agresivo terreno, sería lógico pensar que los Curions, siendo incapaces de enfrentarse a los peligros de la selva, optaron por refugiarse en los acantilados, galerías y desfiladeros de su mundo; lugar de protección ante la visita de las bestias. Ciertamente, fue aquí donde estos seres construyeron su civilización, una oculta y minuciosa sociedad.

Los que han llegado a conocer la república Curiona, saben que cuando sus ciudadanos descubrieron la comunidad galáctica, recelaron de dar a conocer su mundo a la galaxia, e incluso después de establecer contacto decidieron no expandirse más allá de su sistema de origen. Estos hechos se afirman en las parcas relaciones que los curions han mantenido con el exterior; contactos limitados a las asambleas del consejo galáctico, unas tímidas exportaciones de especia, y a un acuerdo comercial de compra de hidrogeno para el mantenimiento a largo plazo de C-U-O Zuliamot, la estrella alrededor de la que órbitan.

En cierto modo, se podría considerar a esta cerrada sociedad y su planeta, como la antítesis de la abierta civilización Bulona y su enorme Aro de Bulon, pero por fortuna, nadie se ha preocupado nunca por ese pequeño e insignificante planeta conocido como Curion. Los secretos ignorados incluso por los propios curions, que este mundo esconde bajo su flora, se han mantenido ocultos mucho más tiempo que el propio universo, conocimientos de casi imposible obtención.

Contra todo pronostico, era un Bulonar el que ahora estaba contemplando la superficie de Curion, un audaz personaje que había destacado en la habilidad de convertir lo imposible en posible, alguien que conocía la autentica situación de la comunidad galáctica. Su nave, el crucero Sentuo-1, era un elegante navío de unos escasos setecientos metros de eslora que se podía catalogar como un antiguo buque comerciante bulon modificado para la exploración galáctica. Aunque muchas veces puesto a prueba en el mayor número de las más insólitas situaciones, el Sentuo-1 había sido derribado por fuerzas de inexplicable procedencia.

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Muy pocos se creían aun que el comandante de la expedición, armado de valor, consiguiera guiar la maltrecha nave hasta una minúscula explanada lo suficientemente alta como para no caer en las garras de la jungla. Aunque asombrados por tal maniobra, la tripulación de la nave no tardó en cambiar su actitud, ya que, al comprobar con los instrumentos de abordo el entorno que les rodeaba, llegaron a una inesperada conclusión.

Durn Dunro no tuvo ni siquiera que esperar a un informe para darse cuenta de que Curion no tenia ningún problema visible: Como podía observar y comprobar, la superficie del planeta no mostraba ningún tipo de trastorno a tener en cuenta; no se detectaban patrones de alteración apreciables en la atmósfera. En contra de lo que los instrumentos habían detectado desde la órbita, el nivel del agua era el correcto y la densa niebla, al desaparecer, abrió paso a una visibilidad de lo más confortable. La pregunta era ¿Quién, cómo y con qué motivo había logrado engañar al consejo galáctico, a un grupo de científicos altamente dotados y a una nave perfectamente equipada hasta el punto de hacerles creer que la atmósfera de Curion se había descontrolado? ¿Quién le había atraído a el y a su tripulación a ese curioso mundo? Sin embargo y en contra de todas esas cuestiones, un inexplicable pensamiento alentador le rondaba en su mente: Sin saber realmente por qué, tenía la certeza de que algo extraordinario se escondía en ese extraño planeta, algo que todavía no llegaba a entender, pero que realmente deseaba encontrar. Ante tal situación, no tenía otra opción que seguir adelante.


–¿Qué debemos hacer ahora, Durn? –preguntó el buroniano Calem Aadiu, segundo oficial del Sentuo-1, mientras tomaba asiento en el sillón que le correspondía en el puente de mando de la nave –No tenemos muchas opciones ¿verdad?

El buloniano se limitó a deambular por la sala, inexpresivo. Manipuló algún que otro instrumento de comunicación para finalmente volver a centrar su mirada en la superficie planetaria que el panel de observación le mostraba. Ante la actitud de su amigo, Calen tomó de nuevo la palabra.

–No te molestes con esos aparatos. A pesar de no detectar daños en la estructura del Sentuo, hemos perdido el sistema de comunicaciones de largo alcance... y no puedo decir que nuestros impulsores estén en mejores condiciones; sencillamente no funcionan. No sé qué nos ha alcanzado, dudo que fuese un ataque electromagnético, pues hizo que nuestro motor dejase de funcionar progresivamente, como si alguien nos estuviera permitiendo aterrizar. De todas formas, si no hubiera sido por tu rápida actuación hubiéramos perdido a la mayor parte de la tripulación. –El segundo oficial sacó un pequeño dispositivo del bolsillo superior de su atuendo, se levantó de su silla, y se lo entregó a Durn–Aquí tienes el informe. También hemos logrado localizar a los pilotos de las naves que nos escoltaban. Según sabemos, sufrieron daños similares a los nuestros.

–Me agrada que no tengamos ninguna baja, Calem, y que los daños no hayan afectado a todos los sistemas de la nave... pero no creo que debamos quedarnos aquí esperando a que nos rescaten. Mucho menos cave esperar que podamos reparar los motores por nuestros propios medios, y tampoco podemos pedir refuerzos.

–No creo que los integrantes de nuestra tripulación estén muy dispuestos a descender a la selva de Curion, Durn. –El buroniano avanzó pensativo hasta el centro de la ovalada estancia– Nuestra misión era la de inspeccionar Curion desde una posición segura, y determinar si corría realmente algún riesgo. Nunca planeamos adentrarnos tanto en el planeta, y menos de esta forma.

–¿Realizó el equipo del escáner una inspección de la zona circundante a la explanada? Me gustaría echarle un vistazo.

–Por supuesto. Puedes encontrar todos los datos que necesites en el informe que nos han preparado –dijo Calem, mientras señalaba el aparato que Durn sostenía en su mano.

El oficial al mando introdujo el informe en su computadora. Unos ágiles movimientos sobre la pantalla interactiva activaron el dispositivo holografico del puente de mando. La sala se oscureció ligeramente y el panel de observación se volvió opaco. En el centro de la sala se empezó a formar una proyección holografía de la superficie del planeta. Lo que parecía una gran zona boscosa ocupaba casi toda la visión, solo en el centro se podía apreciar una muy pequeña meseta elevada de terreno baldío.

–Hemos sido capaces de analizar el mapa en un radio de aproximadamente cuarenta kilómetros –comunicó Calem– Todas las naves que nos acompañaban se encuentran en este área, una zona en la que no hay mucho más que foresta. Tras entrar en contacto con sus ocupantes, les ordenamos que acudieran a nuestra zona de impacto, ya deberían estar de camino hacia aquí– Con un movimiento de dedo, el buroniano hizo resaltar en rojo las zonas de aterrizaje –Lo más probable es que alcancen nuestra posición en poco más de una hora. Entonces podremos decidir que vamos a hacer.

–Eso siempre que no surjan demasiadas complicaciones. Me da la impresión de que este mundo nos guarda bastante sorpresas, Calem–repuso Durn– por ejemplo: el montículo sobre el que se posa esta explanada es demasiado escarpado como para que un grupo de pilotos no equipados pueda treparlo. Ya se me ocurrirá algo con qué subirlos hasta aquí.–El comandante introdujo un nuevo protocolo en el sistema, y la ruta de los pilotos se resaltó en color morado sobre el mapa.–Es mejor que supervisemos su llegada desde el puente de mando.

Al mismo tiempo que los dispersos miembros de la expedición a Curion se reagrupaban, un insólito individuo recorría veloz la exuberante arboleda del extraño mundo. Sin lugar a dudas, había completado su primer cometido con admirable eficacia, y ahora se apresuraba al encuentro que le revelaría su próxima misión. Nadie le obligó a embarcarse en tan osada, audaz y temeraria aventura, pero lo cierto es que nunca llegó a sentirse tan vivo en años pasados como en ese momento. En su interior, la firme certeza de que estaba haciendo lo correcto crecía cada vez más, una tarea que sin duda limpiaría su conciencia.

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Eso es todo por ahora. Espero que este capítulo haya sido de vuestro agrado :D

Escribiré más en breve, os lo garantizo :wink:

Un cordial saludo :D
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Juchubao » 12 Sep 2011, 16:04

Cada vez haces mejor los capítlos. =D>

Está muy bien, sobre todo está muy bien redactado, y la excelente imagen se agradece; sigue así. :D
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Uburian » 12 Sep 2011, 18:32

Muchas gracias, Juchu :D
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Eddlm » 12 Sep 2011, 18:55

¡Vaya si ha sido de mi agrado! ¡Me encanta! Hacia tiempo que lo leía un capitulo de TAGS de este estilo, Uburian :D

=D> =D> =D>
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Re: La asombrosa saga galáctica

Notapor Uburian » 13 Sep 2011, 07:34

Muchas gracias, Eddlm :D

Me pondré a escribir más capítulos en breve :D
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