por SeVi » 10 Jul 2010, 16:18
Capítulo II: El símbolo de "La Guardia"
Había mucha música y bullicio en la calle cuando Fabio abrió los ojos. La pequeña siesta que tenía pensado echarse se había alargado demasiado y se le había echado el tiempo encima. La cabalgata ya había llegado al distrito de Tortosa. Rápidamente se vistió para salir a verla y cuando iba a salir vio el libro de nuevo sobre su escritorio. -Me lo llevaré, -pensó -así luego le echo un vistazo. -El chico lo cogió y salió corriendo a la calle.
Una vez en la calle, la cantidad de gente no le dejaba ver la cabalgata, así que empezó a correr hacia un lateral buscando un hueco para ver. Estaba tan centrado en buscar sitio que no vio venir a la chica rubia con la que acabó chocando haciéndole caer el libro al suelo.
-¡Mira por donde vas! -gritó enfadada la chica -¿Acaso vas por el mundo sin... -La chica se quedó en silencio mientras observaba el libro que recogía Fabio del suelo.
-Perdona, iba un poco distraído.
-¡Ese libro! ¿De dónde lo has sacado? ¡Tiene en su portada el símbolo de "La Guardia"!
-Emmm... no sé de qué me hablas, sólo es un libro de apuntes de historia de la universidad... -intentó disimular Fabio rápidamente al darse cuenta del interés repentino de la chica. -Será mejor que me vaya, tengo prisa. Siento el choque. Adiós.
Allí se quedó la chica mirándo como se alejaba Fabio entre la multitud y con una cara de asombro que no se quitaba.
Finalmente Fabio encontró un buen sitio para ver la cabalgata. Vio pasar numerosos soldados desfilando, máquinas y vehículos de guerra exhibiéndose, autoridades célebres y numerosas carrosas. Pero la que más le llamó la atención fue una carroza que representaba un combate entre el ejército de Rialia y un ave de tamaño descomunal de color rojo. -¡El Fenix! -pensó Fabio -La última batalla de la Guerra donde triunfó Rialia. No sé si creerme esa parte de la historia, me parece demasiado fantasiosa que el ejército de San Lázaro usara animales tan raros en la batalla en lugar de máquinas. Creo que el Gobierno de Rialia decoró la historia para asustar más aún a la población de lo que se esconde en esas tierras...
Al finalizar la cabalgata, Fabio se alejó del bullicio de gente dirección a la biblioteca. A él no le interesaban las fiestas que tendrían lugar después del desfile así que prefirió refugiarse en la biblioteca. Allí observó la portada del libro. No tenía nada más excepto un símbolo, como si fuera una especie de escudo, con forma redonda y dos largas varas que lo cruzaban en forma de X. Encima de él había una corona de flores, de violetas más exáctamente.
-El símbolo de "La Guardia"... ¿de qué Guardia? -pensó Fabio -No me suena ninguna organización llamada "La Guardia". Sin embargo, la corona de violetas encima del escudo... Las violetas eran típicas de San Lázaro. ¿"La Guardia" de San Lázaro? ¿Qué diablos es eso? Aunque esto reafirma mi teoría de que aquel extraño hombre podría venir de "Las tierras oscuras".
Fabio decidió informarse sobre "La Guardia", así que buscó información en libros de historia allí en la biblioteca. No encontraba nada, pero de pronto, en un libro de la Gran Guerra de Eurox encontró algo.
La Guardia era una división secreta del ejército de San Lázaro, especializada en armas biológicas y otros secretos que ni la ciencia ha logrado descifrar hasta ahora. Fue derrotada cuando cayó su última gran arma, el Fenix. Una vez arrasada San Lázaro, no quedó rastro de La Guardia ni de ningún otro superviviente en Rincón Escondido.
-Entonces puede ser un antiguo libro de estrategias militares de San Lázaro. -pensó el chico -¡Genial! Esto es perfecto para conocer la historia de San Lázaro y de la Gran Guerra de Eurox visto desde el otro bando. Decidido, abriré el libro pase lo que pase.
Y así fue, el chico abrió el libro, pero para su sorpresa, estaba en blanco. Ni rastro de una sola letra, como si nunca hubiera habido nada escrito en él. El chico, decepcionado, cerró el libro y se dirigió camino a la tienda con él para ayudar a su padre a cerrar, el día se estaba acabando...
Muy cerca de Playa Abierta, Sanz Martí
-No puede ser ese libro, pensé que era una leyenda... Pero si existe y lo tiene ese chico, ¡aún hay esperanzas de poder entrar! La cuestión es si habrá logrado descifrarlo o simplemente lo tenía como un trasto más. No, seguramente sabe su secreto igual que yo, si no no habría reaccionado de esa forma huyendo con prisas.
-Lidia, cielo, es hora de comer, baja ya.
-¡Ya voy abuelo, enseguida bajo! En fin, quizás me esté metiendo donde no me llaman, pero necesito entrar. Mañana mismo saldré de nuevo al distrito de Tortosa para buscar al chico. De lo que aún no estoy convencida es de si debería robarle el libro o quizás ayudarlo y colaborar con él, tendré que meditarlo bien más tarde... Ahora me voy a comer antes de que mi abuelo se ponga histérico.