Bueno, tras mucho tiempo sin aparecer, vuelvo de mis vacaciones

Y vengo con muchas novedades de Atlantis.
Ahora os enseñaré uno de los barrios más curiosos de la ciudad de Therabis, la tercera más populosa del país y una de las más antiguas de Atlantis. Se trata del Distrito de Eatheniel, un barrio con una historia propia que contaré más abajo.

Pero antes de hablar propiamente de este barrio, os enseñaré los alrededores y el lugar donde está emplazado. Esta zona es el límite inferior de la ciudad de Therabis con las montañas de Dûr Galer, de la Gran Oscuridad, pues aquí se escondía una famosa y cruel banda de forajidos que atacaban y saqueaban la antigua Therabis entre el II-I a.C.

En esta otra imágen vemos como la ciudad termina bruscamente antes de que la montaña empiece.

La antigua Therabis está ahora en el centro histórico de la actual ciudad, pero en esta zona se conserva la Ciudadela de Megta, un pequeño emplazamiento que controlaba el Valle de Thirian, uno de los 3 valles de la zona.

También se puede ver el Molino de Angband, cuyo original data del siglo IV, pero fue reformado durante el medievo.

Otro de los valles, el de Galel, está ocupado por la ciudad de Virgintown, construida por colonos británicos durante la Ocupación.

Según la historia, un grupo de colonos británicos y algunos soldados buscaron un lugar donde crear una nueva ciudad. Pero no sabían cual de los tres valles escoger, aunque todo cambió cuando uno de ellos dijo haber visto a la virgen en el Valle de Galel. El resto del grupo no lo creyó hasta que se cuenta que la Virgen se apareció de nuevo, en pleno día, justo sobre ese valle. En su honor levantaron una gran columna con una estatua de la Virgen María en lo alto, y fundaron un asentamiento en su honor (Virgintown)


Se trata de un pueblo de no más de 5000 habitantes, pero construido con piedra y todo tipo de lujos, como una pequeña Londres. Encontramos plazas, fuentes, arboles, jardines...

En el centro están los edificios más solemnes, que fueron propiedad de la burguesía dominante, que pronto fue sustituida por los estadounidenses que tomaron el relevo en la ocupación de Atlantis.


Pero también encontramos una zona con edificios más pequeños y un aspecto abigarrado, con calles estrechas y son ornamentos. Esta zona fue ocupada por los trabajadores de la zona hasta que se creó el nuevo barrio de Therabis.

Esta es la iglesia de la ciudad, construida entre 1843 y 1850, con el nombre original de Iglesia de la Santa Virgen de valentia. Durante la segunda guerra mundial fue brutalmente destruida por un bombardero japonés y en su interior fallecieron 21 civiles. Quedó derruida hasta la recuperación económica (donde tuvo gran importancia el empresario Eatheniel, a quien consagraron la nueva iglesia, llamada de San Eatheniel. A pesar de ello, este personaje nunca fue beatificado y hasta el Vaticano pidió que se retirara ese nombre, asunto que aún sigue levantando polémica.

Finalmente encontramos un edificio más moderno aunque de aires coloniales. Se trata de la antigua Torre Eatheniel, personaje de gran importancia y del que hablaré más tarde.

Pasamos a épocas más modernas. Encontramos otro pueblo, este situado en una ladera de la montaña. Se trata de Dracia, con apenas 2400 habitantes.

Podemos destacar su moderna estación de ferrocarriles, constuida con hormigón y cristal por el arquitecto francés Pierre LeNottre.

Y ahora, antes de hablar de Therabis, hay que añadir que por esta zona llega la autopista nacional V-9, que conecta con todo el sur del país y se adentra hasta el interior de la ciudad d eTherabis.

Bien, pues llegamos al fin a Therabis, al Distrito de Eatheniel. Este distrito es el tercero más habitado de la ciudad, pero el primero en cuanto a área edificada. Cuenta con 184.307 habitantes y realmente no tiene ningún atractivo cultural o turístico, exceptuando los jardines y la gran torre central, siendo esta última el símbolo del distrito.

Ahora os explicaré un poco de la historia del distrito con fotos intercaladas.
Realmente, el Valle de Figorin donde se encuentra, no estuvo habitado hasta el 1874, cuando una familia de agricultores decidió levantar allí su granja, que estuvo sola en la zona hasta el 1923. Tras la Gran Guerra, Therabis creció considerablemente y en este momento llegó al Valle de Figorin. Pero cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, en el valle apenas se contaban 2000 almas.

Tras la guerra, muchos recursos se invirtieron en la reconstrucción del país, y las ciudades no crecieron, sino que algunas zonas fueron abandonadas. Eso ocurrió aquí. Pero tras cierta recuperación, en los cincuenta y sesenta volvió a crecer, y el Valle de Figorin alcanzó los 10.000 habitantes.

Pero todo volvió a cambiar con la crisis del petróleo, que en Atlantis se vivió con intensidad. De nuevo mucha población se marchó a la capital, que crecía de forma exagerada. Pero todo empeoró con la nueva crisis que afectó a Atlantis entre 1985 y 1992.

El mercado se hundió al perder el soporte de los países asiáticos y, sobre todo de la India. En esta situación, muchos ciudadanos se marcharon a Europa o a Estados Unidos. Los últimos datos señalan una cifra que rondaría entre los 140.000 y 200.000 emigrantes. Pero lo peor fue el dato del paro: 1.248.500 parados sobre una población de apenas 9.500.000

Pero lo peor estaba por llegar. La bolsa acabó de desplomarse el 9 de febrero de 1986. La inflación superó durante una semana el 3000% La famosa escritora Margareth Hiberla señalo en boca de uno de sus personajes: un café que hoy me cuesta un dólar, mañana puede valer once, o quizás diez centavos. Es una locura.

Y no estaba equivocada, pues la terrible crisis afectó a todos los estamentos y a la vida cotidiana de la población. Era necesario un milagro, y este llegó de manos de un joven empresario therabino. Su nombre, Eatheniel Edêl Deliaverna. Nació el 31 de julio de 1960. Su padre era un magnate del petróleo y controlaba el 90% de este producto en el país. Su inesperada muerte dejó a Eatheniel, el 1980, a sus 20 años, con una fortuna de más de 20 billones de dólares y casi el monopolio del oro negro en Atlantis.
Pero cuando llegó la crisis, el precio del petróleo se redujo drásticamente, y Eatheniel vio que debía actuar para sacar a flote su compañía petrolífera. Decidió así dar un giro refundando la compañía como Eatheniel World Industries.

Creó un conglomerado de pequeñas empresas de todo tipo, todas ellas sujetas por el capital aportado por el petróleo, aunque este pilar fue diluyéndose con el tiempo. Nacido en Therabis, Eatheniel centró sus actividades en dicha ciudad, que durante la crisis se había convertido en el salvaje oeste. La criminalidad se disparó hasta el punto que en el centro de la ciudad se levantaron dos recintos amurallados en cuyo interior vivían las clases distinguidas, y el exterior fue dejado a su suerte.

Eatheniel llegó con el sencillo lema de: Para quien quiera trabajo, Eatheniel World Industries es su sitio. Efectivamente, en apenas ocho meses creó hasta 60.000 puestos de trabajo, que aumentaron a 200.000 para principios de1987. Pero Therabis quedó pequeña, y el primer impulso fue levantar un nuevo barrio para trabajadores llegados de todo el país. Así nació el Distrito de Eatheniel. Su compañía aportó el capital y los trabajadores para la construcción del ferrocarril en Therabis.


El mismo Eatheniel diseñó la estación central y puso la primera piedra el 12 de agosto de 1987.

Pero eso no era suficiente, y también sufragó la construcción de la autopista, que se terminó en 1989. Alrededor de esa misma autopista que los trabajadores del nuevo distrito levantaron, se fué creando el barrio, con casas de todo tipo.


El gran impulso en obras públicas de Eatheniel World Industries llegó irritar al gobierno, pues aquel joven empresario estaba consiguiendo que Therabis y el sur del país empezaran a superar la crisis, mientras que el norte y, sobre todo, la capital, seguían sumidos en el caos económico.

Y fue entonces cuando Eatheniel dio un paso más y extendió la influencia de su compañía a todo el país. Hay que destacar que entre 1985 y 1988, su compañía había invertido unos 150 billones de dólares en obras públicas, pero Eatheniel World Industries había tenido unas ganancias muy superiores. Incluso un reportero se atrevió a escribir que la compañía de Eatheniel era entonces más poderosa que el gobierno de Atlantis.

Y es que el efecto de la mano de Eatheniel World Industries sobre todo el país fue el mismo que en Therabis. Llegó a crear hasta medio millón de puestos de empleo y revitalizó la economía. A pesar de haber empezado como empresa petrolera, en este momento olvidó su pasado y comenzó con la revolución verde, creando el primer parque eólico del país.

Pero a pesar de su entonces mira nacional, no olvidó su ciudad natal. Allí también sufragó la construcción de los jardines elevados de Du Werden, una importante obra de ingeniería.

Sobre una base de piedra local se construyeron jardines austeros, plazas y pequeños edificios de toque solemne que revitalizaron la vida en el distrito que hacía honor a su creador.



En el centro de los jardines encontramos una gran plaza de suelo blancos con numerosas fuentes y una austera torre.

Pero mientras el gobierno y la oposición se peleaban por tomar el control de la situación en medio de un clima de crisis cambiante, llegó el verdadero milagro: las elecciones generales de 1990. Más bien fue un año antes, cuando Eatheniel informó de sus intenciones de presentarse en las elecciones con su recién creado partido, el Partido Atlante del Pueblo.

Como era de esperar, no solo le votaron los más de 600.000 trabajadores que habían abandonado las listas del paro gracias a Eatheniel World Industries, sino que obtuvo la mayor victoria electoral de la historia de Atlantis, con el 87% de los votos en las también más multitudinarias elecciones, hasta el 94% de participación.

Su actuación, ahora como presidente del gobierno, siguió la línea habitual, y consiguió salir de la crisis en apenas dos años. Además, no solo consiguió salvar los muebles, sino que fortaleció la economía creando finalmente un mercado internacional fuerte, respaldado por una nueva moneda, el dólar atlante. Sin duda, Eatheniel consiguió que Atantis renaciera de sus cenizas con más fuerza que nunca, situándola entre las potencias económicas de Asia y de todo el mundo.
Por ello el pueblo de Therabis pagó la construcción de una colosal estatua de Eatheniel bañada en oro, que se situó en medio de su distrito, “Cerca de las casas y de la gente que él salvó”, como reza a los pies de la misma.

A partir de entonces, los cambios en el distrito fueron pequeños. Hay que destacar el Estadio de los Therabis Warriors, de 1994.

También se construyó un Zoológico.

Este casino fue el más alto del país hasta el 2005, y su nombre, Casino Rebirth, señala que fue levantado en una ciudad y un país que acababa de nacer de nuevo.

Este es el Museo de la Guerra, terminado hace pocas semanas para guardar recuerdo de la reciente guerra contra Arcadia.

El Paseo Eatheniel fue remodelado en 1996 y se ensanchó considerablemente. Este gran paseo comunica el centro de Therabis con la Nueva Torre Eatheniel, centro de la recuperación económica nacional.

He dejado para el final el verdadero símbolo de la ciudad, el Coloso, lo llaman unos, el Inicio, otros, aunque su nombre original es Nueva Torre Eatheniel. Esta gran obra fué llevada a cabo entre 1986 y 1989, para trasladar la sede de Eatheniel World Industries a estas oficinas con 4400 trabajadores (1100 en cada una de las torres). Pero lo realmente impactante es ver esa gran construcción de 574 metros rodeada de edificios que apenas alcanzan los 45 metros de altitud. Es un símbolo de grandeza, de que todo es posible.

Bueno, espero que os haya gustado y no os hayáis dormido con el tochaco de historia
