Buenos días... tardes... noches... Ya me entendéis
Aprecio mucho vuestros comentarios. Lo cierto es que los escudos los monto (porque en parecen puzzles a veces) en su gran mayoría yo. Es cierto que utilizo muchos escudos de base, pero suelo retocarlos añadiéndoles "muebles" (significados), cambiándoles el color, añadiendo motivos, etc.
Mi gran pasión es la Historia, de ahí que estudiara algo de heráldica y vexilología, pero se me escapan cientos de detalles a veces. Hablando de los escudos, los suelo hacer con Gimp o Photoshop (pero no tengo una gran habilidad), igual como hago los logos de las empresas bellinas. Muchos son de invención mía siguiendo las pautas creadas para representar a cierta familia o determinado suceso bellino, pero muchos otros carecen de sentido y son escudos que ya existen pero modificados en momentos de aburrimiento
¡Y ahora a continuar con la actualización!
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Tú, preso desde hace ya un tiempo en la cárcel de Elliot Welch has modificado tu conducta, has mejorado como persona y pretendes dejar tu pasado atrás para ser una persona de bien. Bellavista te ofrece una segunda oportunidad. Siempre lo hace porque confía en las segundas oportunidades. Se te ofrece reingresar en la sociedad. Es obvio que aceptas. Enhorabuena, eres uno de los pocos elegidos. Pero atención, Bellavista quiere que te reintegres por ti mismo, por lo que tu camino ha de pasar por un Centro de Reinserción. O lo que es lo mismo, una sociedad en miniatura.
Veamos, como yo, Odell Dalton, el "reinsertado" más viejo de Bellavista te podría explicar en qué consisten los Centros de Reinserción...
Los Centros de Reinserción que existen en Bellavista son un regalo para todos los delincuentes que mejoren su conducta y entiendan que lo que hicieron está en contra de la ciudadanía, siempre y cuando su delito no estuviera manchado de sangre o deshonra para otra persona. Al que acabas de llegar es al de mayor tamaño del país, en Cima de Vila, un lugar donde podremos convivir más de 5.000 personas y que tiene el tamaño de un barrio habitual, donde todo estará a tu disposición.
Tú, que acabas de llegar, presumo que has entendido que aquí podrás tener más libertad. Estás en lo cierto, aquí dentro eres libre. En el mismo momento que llegas se te entrega, de forma totalmente gratuita, una casa unifamiliar de 100 metros cuadrados.
¿Te ha llamado la atención lo de "casa unifamiliar"? Es normal. Has de saber una cosa, pero primero... ¿Tienes familia? Si la tienes estás de suerte, porque sí, tu familia podrá vivir aquí contigo, de hecho, es por ello por lo que se te concede una casa exclusivamente, donde podrás criar a tus hijos, verlos crecer o mismo tener esa ansiada familia, todo ello mientras cumples tu condena. ¿Lo vas entendiendo ahora? Te estás reinsertando.
Supongo que estarás feliz ahora que tu familia y tú podréis vivir juntos de nuevo. De no tenerla no te preocupes, las casas son un poco más pequeñas, pero igualmente agradables.
Perfecto, todo esto está muy bien, familia, casa, ¿pero hay más? Por supuesto, pero antes de continuar de he informarte que aquí has de trabajar para reinsertarte.
Claro, no esperabas eso, pero tranquilo, dentro del Centro podrás dedicarte a la profesión de tu vida en su área laboral, cerca de las casas. ¿Que nunca has trabajado? No te preocupes. ¿No tienes estudios? Tranquilo. Aquí podrás formarte hacia la profesión que siempre soñabas en el mismo lugar donde tus hijos estudian, porque sí, tanto tu esposa, que podrá trabajar en lo que desee en el Mercado, como tus hijos podrán estudiar, todo dentro del Centro.
Ah, y tu fe podrá ser profesada, dentro del Templo Multiconfesional, por supuesto.
Ahora que ya estás instalado, tu familia está aquí, puedes pasear libre por las iguales calles del Centro, mas si te aburren tus vecinos o te apetece ir a otro lugar no hay problema, tienes total libertad para moverte dentro del recinto.
Cierto, los muros parecen un poco bajos y desprotegidos... No sería muy difícil salir... ¿Verdad?
Yo no te lo recomiendo, los muros guardan muchos secretos y juguetes de los oficiales. Y no te olvides de los coches camuflados de las oficiales.
Me parece que salir no será muy fácil. Bueno, siempre puedes ver los coches pasar por la ventana del ático.
Cuando te aburras de eso, no tardarás mucho, puedes dar una vuelta más allá de las casas hacia la otra parte del Centro, la parte verde.
Allí tienes hectáreas y hectáreas para pasar el tiempo con tu familia. Además, si quieres, puedes dedicarte al cultivo que será exclusivo para ti y que se te cederá si lo pides. Y pescar, también puedes pescar.
Añado que practicar un deporte aquí es casi obligatorio, no por que te obliguen, si no porque estamos dotados de varias pistas de baloncesto, tenis y fútbol. Del último deporte decir que somos un equipo más de la Liga Bellina y entrenamos duro para ser reconocidos y poder vivir de ello luego de nuestro paso por el Centro, como pude hacer yo, por ejemplo.
Obviamente no me olvido del edificio del fondo, es el hospital, donde te atenderán sin problema de cualquier enfermedad que por desgracia contraigas.
¿Vuelves a mirar las luces de los coches de fuera por la ventana? No te preocupes, algún día podrás salir y ser uno más de ellos. Tu deuda con la sociedad está medio pagada, estás aquí de paso y tu vida es importante como para que la malgastes en cuatro paredes de una cárcel habitual. Con el tiempo, ayudarás a personas como tú a adaptarse a la vida de reinserción.
Yo hace 45 años que me reinserté y aquí estoy, ayudándote.
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Espero que os gustara la actualización, no me voy sin dejaros un pequeño adelanto....