Hola Chicos y Chicas aquí les traigo el capitulo ocho, que tiene por titulo Cual es tu secreto?, espero que sea de su agrado
Realmente estaba preocupada, porque Connor se habrá ido así, estará molesto conmigo por la pelea, pero si la culpa es de el no mía, no comprendía nada en ese momento pero tenia que calmarme y cuidar de Arturito.
Al estar con mi hijo me di cuenta que estaba triste le hacia falta su padre y para que se le pasara la tristeza decidí leerle una historia.
Pero cuando iba a colocar a Arturito en la cuna recibí una llamada, era Connor.
Roselis: Connor porque te fuiste.
Connor: No te preocupes regresare muy pronto y te lo contare todo cuando llegue a casa- y colgo.
Le leí la historia a Arturo, con la cual se durmió enseguida.
Pasaron las horas y Connor no llegaba así que decidí llamarlo, para saber si estaba bien y no le habría pasado algo malo.
Roselis: Connor estas bien, en donde estas?
Connor: Cariño estoy cerca en 5 minutos llego - y colgo.
Lo escuche agitado parecía que venia corriendo. Así que decidí cambiarme de ropa, para así esperarlo y escuchar su explicación.
Llego a casa como dijo en 5 minutos, lo esperaba en la pequeña cocina, nos quedamos hay parados en silencio y mirándonos fijamente, parecía que la que tenia que empezar la conversación tenia que ser yo.
Pero el que hablo fue el.
Connor: Roselis, salí corriendo de la casa porque tome una decisión.
Roselis: Cual decisión?
Connor: Renunciar a mi trabajo.
Roselis: Que.... renunciar a tu trabajo.
Connor: Lo cual acabo de hacer, Roselis, vengo de la empresa ya renuncie.
Roselis: Connor porque?
Connor: Deja que te explique, Roselis mi pasión es la escritura y paso horas y horas sentando en la computadora es escribiendo libros,los cuales se que son buenos, mi sueño de toda la vida siempre ha sido ser un gran escritor.
Roselis: Pero Connor yo no sabia nada, tu tenias que habérmelo dicho antes.
Connor: Tenia vergüenza, y espero que me perdones por habértelo ocultado.
Roselis: Que te perdone Connor yo......
Connor: Se que hice mal en ocultártelo, ademas también esta lo de renunciar sin decírtelo, por favor Roselis perdóname.
Roselis: Connor yo no tengo nada que perdonarte ese es tu sueño, tu quieres ayudarme con el mio, porque yo no puedo hacer lo mismo.
Connor: Oh Roselis por eso te amo tanto.
Roselis: Pero Connor que haremos ahora que tu no trabajas.
Connor: yo si tengo trabajo.
Roselis: Pero si renunciaste.
Connor: Si pero una editorial leyó mi libro y parece que le gusto y quiere que escriba libros para ellos.
Roselis: Connor eso es grandioso.
Connor: si lo se, ademas Roselis quiero aclararte que si esa editorial no me hubiera contratado no hubiera renunciado a mi trabajo, yo amo lo que tenemos y amo sobre todo Arturo para que por mi a el le falte algo.
Roselis: Lo se y te amo por eso.
Connor: Tengo una idea como mañana no trabajas vamos al parque a celebrar en familia que te parece.
Roselis: Es una gran idea ademas a si pasas tiempo con Arturo que hoy te extraño mucho.
Al Otro día así lo hicimos Alistamos Arturo y nos fuimos al parque.
Todo estaba decorado muy bonito pues era el día del amor. Arturo se divirtió mucho su papa lo estaba consintiendo demasiado.
Y con tanta diversión siempre hay alguien que se enferma por comer de mas, y como soy medico mi deber es ayudar.
Despues de ayudar a esa persona busque a Connor y gran fue mi sorpresa cuando me lo encontré en una caseta vendiendo besos y claro fui y compre un beso.
Roselis: Quiero un beso Connor.
Connor: A ti te valen el doble.
Roselis: A mi no me importa por un beso tuyo yo pago lo que sea.
Creo que me pase un poco con el beso, Connor quedo todo embobado.
Ya en casa y con Arturo durmiendo plácidamente en su cuna Connor y yo nos Reconciliamos, claro que ya todo estaba arreglado desde ayer pero terminar un día tan perfecto como el de hoy así fue maravillosos, y para nosotros era demostrar que todo estaba bien.
Pasaron los días rápidamente y todo volvio a la normalidad, Connor trabajaba ahora en casa, Arturito era un niño muy inteligente seguía creciendo cada día mas, y yo continuaba trabajando en el Hospital.
Arturo cada día aprendía cosas nuevas y Connor y yo estamos muy felices por ello.
Connor y yo todas las noches nos sentábamos hablar de como nos había ido en el día, me alegre al saber que el estaba avanzando en su nuevo trabajo y yo le conté de todos los acenso que había tenido en el trabajo, todo era maravilloso.
Y así llego el cumpleaños de Arturo, el cual le celebramos Connor y yo, le compramos su tarta preferida de chocolate con vainilla.
Les presento a todos a Arturo no es precioso mi hijo, ademas es idéntico a su padre.
Connor y yo estábamos felices por Arturo porque halla crecido perfectamente, es un niño muy inteligente y lo que le encanta es pintar y cantar, seguramente cuando grande sera un gran pintor o seguramente se dedique a ser una gran estrella del pop.
Me encanta como pinta mi hijo, tiene talento y la casa la voy a llenar con todos los cuadros que el pinte, estoy muy orgullosa de el.
Bueno hasta aquí se los dejo espero que le haya gustado