Sobre los guiños, bueno, para entenderlos es necesario leer el final del legacy Doumoon de Eliana, pero tendrías que comenzar desde el principio XD
Y sobre la polémica, fue mala mía, pero si no terminaste odiando a Warrior, mucho mejor
Ahora les dejo un nuevo capítulo. Espero que les guste ^^
La muerte de papá nos había afectado a todos. Realmente había sido un gran hombre en vida, y de eso no nos ibamos a olvidar jamás. Ser el último de sus hermanos en morir le había afectado un poco, en especial por mi querido tío Wolverine, que murió de una manera trágica, dejando a una esposa y a dos hijos. Lo bueno de esto es que ahora podrá encontrarse con todos sus familiares, y seguramente será felíz allá.
En cuanto a nosotros, todos estábamos muy dolidos. Mi hermana, mis hijos, Alidaen. Era muy difícil aceptar que papá no estaba, pero de a poco nos ibamos distrayendo con otras cosas.
Yo había comenzado a tocar la batería. No era el mejor en esto. De hecho, mi prima Tyrene tenía las mejores aptitudes para la música. Yo solo quería aprender por amor al arte, y por suerte en mi banda tenía maestros de sobra.
Por otro lado, mi cuñado Edelmar, o Eddie, como mi hermana le llamaba, la convenció de hacer un nuevo viaje al pasado para conocer más lugares, ¿y quién sabe? quedarse un par de años allí.
En su ausencia, mi esposa cumplió años pero lamentablemente no pudo hacer una fiesta. Trabajaba hasta tarde y solamente estuvieron con ella mi hija Hannelore y Bernarda, mi única sobrina. ¿O tal vez ya no lo era?
¿?: ¿Mamá? ¿Papá? ¿Están aquí?
Haymitch: ¡Déjame ayudarte!
Evidentemente, aquella jovencita era mi sobrina, por lo que le contó a Haymitch luego de salir de la máquina. Su nombre era Celeste y venía de la Edad Media. Aquello le trajo tanta curiosidad que comenzó a llenarla de preguntas.
Haymitch: No había vehículos allí, ¿verdad?
Celeste: ¿Ve... vehículos?
Haymitch: Lo que usaban para viajar de un lado a otro.
Celeste: Oh, había caballos o mulas y algunos carros.
Haymitch: ¡Genial! ¿Quieres que vayamos adentro? Te llevaré con mi tía.
Celeste: Sí, ya quiero entrar a ese castillo
Haymitch: No es un castillo. Es una casa
Los chicos no tardaron en encontrar a mi hermana, que estaba en la sala, mirando la televisión tranquilamente
Tanathya: ¡Oh, hija! ¡Por fin llegas! Pensé que te habías perdido en el camino.
Celeste: No, madre, por suerte no. Aunque todo ese lío del tiempo me marea un poco.
Tanathya: Te lo expliqué varias veces hija, pero parece que no entiendes mucho de esas cosas. Y ahora será mejor que vayamos a cambiarte esa ropa.
Celeste: ¿Qué hay de malo con mis prendas, madre?
Tanathya: Están muy pasadas de moda, y con ese vocabulario te mirarán como bicho de feria. Necesitamos un cambio urgente.
Tanathya a veces es muy crítica con la forma de vestirse de los demás, pero la verdad es que tiene muy buen ojo para la moda y para mejorar el aspecto de las personas. Lo izo con el primo Thresh, con su esposo Edelmar, con su hija Bernarda y ahora le tocaba a Celeste.
Tanathya: ¿Y? ¿Te gusta tu nuevo look?
Celeste: ¡Me encanta! ¡Y mi coleta combina con mi nombre! ¡Eres genial, mamá!
Tanathya: Me alegro mucho de que te guste.
Con peinado y ropa nueva, Celeste demostró tener una gran habilidad para la música. Podría enseñarle muchísimas cosas y creo que sería una alumna excelente.
Llegó el cumpleaños de Edelmar, y con esto una nueva etapa por vivir junto a nosotros.
Tenía a mi hermana por esposa, y a pesar de ser ella una persona de pensamientos oscuros, se habían elegido mutuamente y eso es lo importante.
Otro que cumplió años fue Haymitch. Mi hijo se convirtió en todo un jovencito. Le veo un buen futuro, y creo que él nació para ser una gran estrella que encandilará a todos.
Tengo el presentimiento de que será la promesa del fútbol, y si no de algún otro deporte, porque realmente es algo que se le da muy bien.
El mismo día, mi hermana se marchó con su familia, ya que todos necesitábamos algo de espacio y además ya éramos muchos viviendo aquí. Por suerte encontraron una linda casa y vendrán a visitarnos cuando puedan.
Ahora que estábamos más tranquilos, nos íbamos dedicando a nuestras actividades favoritas.
Haymitch hacía ejercicio TODO EL DÍA. Según él, tenía que estar fuerte y delgado. Me pregunto si es la adolescencia lo que los vuelve tan vanidosos. A lo mejor se siente presionado por su entorno, o querrá conquistar a alguna chica.
Por mi parte, comencé a tocar el piano. No, chicos, no dejo el rock por nada, pero algo de letras melancólicas hacen bien. También componía algunas canciones románticas que derretían a Alidaen.
Alidaen: Ay, mi rockero romántico... ¿Por qué no me cantas una canción mientras...?
Thaerion: Claro, claro. Pero no lo digas tan fuerte que nuestros hijos están cerca. Vamos a decirles que vayan a dar un paseo.
Alidaen: De acuerdo, mi amor. ♥.♥
Mientras nosotros estábamos con nuestros asuntos...
...los chicos se fueron al cementerio, con la excusa de encontrar algún rastro de nuestros antepasados. Y vaya que lo encontraron. En especial el de “ella”
Sí. Hannelore encontró los restos de su madre. Y eso la puso algo triste.
Hannelore: ¿Por qué, mamá? ¿Por qué me dejaste? ¿Qué pasó contigo?
Thaerion: Yo puedo explicarte todo lo que necesites saber.
Thaerion: Bueno, ella era una mujer hermosa, exactamente igual que tú. Realmente la amé mucho, pero...
Hannelore: ¿Pero qué?
Thaerion: Me decepcionó. Me engañó con otro hombre y nos divorciamos al poco tiempo.
Hannelore: Y luego murió, ¿verdad?
Thaerion: Sí. Murió. Pero quiero que sepas que ella te quería mucho, y decidió que te quedaras conmigo porque sabía que yo te cuidaría bien. Ahora quiero que seques esas lágrimas y que disfrutes de tu fiesta, ¿sí?
Hannelore: De acuerdo, papá.
Cuando llegaron los invitados, Hannelore se sentía mejor y dispuesta a celebrar un año más de vida.
Seguramente todo lo que se propusiera lo iba a lograr. Ella era muy inteligente e iba a encontrarle la solución a todos los problemas que surjan en el camino.
Y para celebrar que ya era mayor de edad, la llevé a Blueberry, mi bar favorito. Nos divertimos mucho soplando burbujas, y la animé a que probara algunos tragos con plasma. De todas formas, no pudimos quedarnos mucho, porque la naturaleza me llamaba y bueno...
Thaerion: Necesito ir al baño, hija, ya vengo.
Hannelore: Papá, están clausurados. Vamos a tener que ir a casa.
Thaerion: ¡Pero no llego a casa!
Hannelore: Vayamos a la casa de al lado. No es muy tarde.
Ella salió corriendo, y yo traté de seguirle el ritmo, pero iba inhumanamente rápido. Cuando la alcancé, estaba conversando con un muchacho. Se la notaba algo nerviosa.
Hannelore: Hola, perdón por despertarte, pero quería saber si nos prestarías tu baño.
¿?: Tranquila, no me has despertado. Y sí pueden pasar, no hay problema.
Hannelore: Muchísimas gracias.
Hannelore: Disculpa, ¿Cuál es tu nombre?
¿?: Me llamo Simon.
Hannelore: Bueno, gracias, Simon, por ayudarnos.
Simon: De nada, fue un placer conocerte... Eh...
Hannelore: Perdón, me llamo Hannelore, olvidé decirlo. ^^
Simon: Es un nombre precioso.
Hannelore: Los dos nos despedimos y regresamos a casa. Ella estaba muy emocionada por lo ocurrido y tenía la esperanza de volverlo a ver. Cuando llegamos, nos encontramos con una gran sorpresa.
Hannelore: ¿Mamá? ¿Eres tú?
Haymitch: ¿Pueden irse? Quiero dormir, tengo colegio mañana.
Thaerion: Será mejor que duermas en otro lado, tenemos que arreglar unas cositas.
Hannelore: ¿Eres mi madre? ¿Sí o no?
Liaren: Sí, soy tu madre. De no ser por tu tía Tanathya, estaría viva.
Hannelore: ¡¡¡ESO ES MENTIRA!!! ¡No sería capaz de eso!
Liaren: ¡Tu tía hizo estallar esa bomba! ¡Esa zorra me mató!
Esto era inaceptable. No iba a permitir que dijera semejantes mentiras de mi hermana, y menos esa persona que me hizo tanto daño.
Thaerion: ¿Por qué no te callas? ¡Deja de hablar así de mi hermana! ¡La única zorra eres tú! Ahora vete. No quiero verte nunca más por aquí o haré que te exterminen.
Liaren: Pero... Pero... Hija, por favor...
Hannelore: Tú no eres mi madre. Alidaen lo es. Para mí no existes más.
Mi hija salió corriendo y yo traté de alcanzarla. Estaba muy triste y la invité a que se descargara.
Hannelore: No puedo creer que tenga a una bruja de madre. Me ha decepcionado completamente.
Thaerion: Lo sé. Lamento decirte lo bueno de ella y no advertirte sobre lo malo. Quería que tuvieras un buen recuerdo de ella. Lo siento.
Hannelore: No tienes por qué pedir disculpas. Hiciste lo correcto, papá.
Después de todo este lío con mi ex, pudimos tener un poco de tranquilidad, pero estaba un poco tenso, así que Alidaen me dio unos masajes.
Luego recordé que la máquina de Tanathya había quedado en casa, por lo que le hice una propuesta.
Thaerion: ¿Qué te parece si vamos a visitar a tu madre? Hace mucho que no la vemos.
Alidaen: ¿Seguirá viva?
Thaerion: ¿Qué te parece si lo averiguamos?
Esa misma mañana nos fuimos al pasado. ¡Qué hermoso fue ver la sonrisa de Lithiel al vernos! Estaba muy anciana, pero muy feliz. También supimos que Kheran habiá tenido un hijo y que había sido llamado a formar parte de las tropas del rey.
La verdad es que nos quedamos mucho tiempo porque Alidaen había quedado embarazada otra vez y quisimos que la familia de mi esposa conociera a su nieta. Al cumplir ella dieciocho, decidimos regresar. Si llegábamos a separarnos, le dimos instrucciones para que se ubicara y pudiera encontrarnos.
Y parece que no tuvo problemas.
¿?: Mamá, ¡ya estoy aquí!.
Alidaen: ¡Oh, hija! ¡Lo lograste!
Les presento a mi hija del pasado, Hazelle Glawthorne.
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Bueno, por cuestiones de comodidad y de poder expresarme mejor, cambié de formato
Es muy parecido al que usaba al principio, pero con la diferencia de que no es un diálogo estilo libro, si no más teatral, como lo usan Rucklia y Saclae.
Espero ir mejorando con el paso del tiempo, y si es necesario, cambiaré el formato de nuevo, pero espero quedar así XD
Ahora les dejo las fichas de Hannelore y Hazelle, que son las jóvenes adultas más nuevas de la familia. Cuando las tenga listas, iré dejando las de los otros integrantes