Me alegro de que te guste. Soy bastante mala haciendo sims, pero me estuve un buen rato con ella. Estoy orgullosa *^^X
Capítulo 1Mi cambio de nombre no fue arbitrario. Los trámites tuve que hacerlos en secreto nada más llegar a la mayoría de edad, así como los trámites para la compra de la casa. No quería que mi madre me echase de casa antes de tiempo.
Como ya dije, esa vieja bruja era una mujer mezquina y tacaña a la que no le gustaba trabajar, pero si gastar en sí misma. Mi padre había sido un hombre con bastante dinero, pero la herencia que me dejó había sido casi dilapidada por ella en “cosas para mi niña” –obvia mentira, se lo Gastón en sus cirugías y ropa de marca-. Sabía esto desde mi adolescencia, por lo que cuando fui lo bastante mayor, trabajaba en los horarios de los clubes extraescolares en secreto, normalmente en restaurantes de comida rápida, para que esa bruja operada no quisiese una parte de mi sueldo y poder guardarlo todo para irme cuanto antes.
Esta fue la casa que me pude comprar. Decidí mudarme a las afueras de Westerberg, una gran ciudad. ¿Por qué? Quería tener la posibilidad de un mundo grande y variado, distinto al pequeño pueblo de Moonlight Falls. También escogí un lugar con un jardín tapado… ¡No quería arriesgarme a perder mis plantitas en por un zombie de ciudad!
La remodelé añadiéndole un poco –mucho- de mi color favorito. Adoro el verde en todas sus formas, pero cuanto más chillón, más me gustaba. Me recordaba al verde de la hierba y las plantas.
Eso si, aún me faltaban cosas. Quería ponerle placas solares en el techo y empezar a utilizar energía limpia, pero para eso aún me quedaba tiempo de esfuerzo y dedicación a mi jardín. Porque ese era mi sueño, tener un jardín perfecto y ser completamente autosuficiente.
Por si lo preguntabais, esta soy yo. Annie Black, ahora llamada Annthea White. Annthea significa en griego “Floreado” o “Florido”. Lo considero el mejor nombre para alguien que quiere hacer florecer sus plantes y hacer que sean perfectas. White… Bueno, creo que es bastante obvio. No tengo complejo alguno por mi piel, pero si es cierto que los chistes del tipo “¿Y por que te llamas Black si eres blanca?” me ponían muuuuy nerviosa.
Y, de paso, cortaba mi único lazo con mi madre. Es un nombre que me parece correcto para mi, y no necesito ninguna clase de aprobación materna. Además, cuando me fui, me dejó muy claro que esa ya no era más mi casa.
También es importante mi nueva adquisición: ¡Mi bicicleta de segunda mano! Paso de ir en taxi o en coche, es demasiado contaminante y en bicicleta puede irse a cualquier parte también. ¡Son todo ventajas!
Lo primero que hice fue acercarme al supermercado más cercano a por semillas. Allí, me dijeron que para poder venderles lo que plantara, si quería hacerlo, debía registrarme como autónoma en el ayuntamiento. Cosas de leyes, ya sabéis.
Decidí primero plantar mis plantas y luego dedicarme a temas de papeles. Ya había tenido demasiado de esos antes de ir a Westerberg.
El Ayuntamiento estaba lejos, pero no soy de las que se molestan por pedalear un rato. Hacía calor, pero pude aguantarlo fácilmente y llegar a mi destino en menos de media hora, menos mal.
Eso si, había muchísima gente esperando, por lo que tardé… Demasiado.
Menos mal que me entretengo con cualquier cosa.
Annthea: Jeje… Gatito~
Cuando salí, aproveché para conseguir un libro sobre jardinería. Necesitaba ampliar mis horizontes, no solo quería tener las plantas comunes y corrientes como tomates, uvas o lechugas. Incluso desde el principio había empezado a plantar raíces de mandrágora.
Así que nada más llegar empecé a leerlo y estudiarlo. Solo tenía información general de plantas, pero es mi primera vez cuidando un jardín, así que esa información igual me venía bien. ¿Sabíais que hay que quitar los hierbajos todos los días porque son dañinos, no parte de la planta?
También me hice la cena. Así empezó mi rutina de día tras día. No sabía cocinar nada más allá de ensaladas de otoño, pero para mí estaba bien, siempre fue mi plato favorito. Sí, me gustan las cosas sencillas.
Después me duché y me fui a la cama. Me sentía libre, al fin estaba haciendo lo que quería y no estudiando gilipolleces en un instituto que en un futuro no me serviría de nada. Ese fue el primer día de una rutina cómoda y tranquila que de por si me encantaba.
Me levantaba a las cinco. Al fin y al cabo, era verano, así que salía en mi ropa de dormir a cuidar mis plantas cuando aún no salía el Sol. Fertilizaba las plantas, las regaba y les arrancaba los hierbajos todos los días antes de desayunar o ponerme a estudiar.
Pero lo cierto es que aunque estuviese cómoda y me sintiese bien replantando al mundo lo que la humanidad le había arrebatado… Había veces en las que me sentía tremendamente sola. Era un sentimiento extraño, incluso estaba pensando en adoptar alguna mascota, pero sentía que no había espacio para que estuviese cómoda en casa y mis ingresos solos no eran suficientes para alimentar, cuidar y bañar como es debido a un animal.
Decidí entonces pasarme algún día por uno de los locales cercanos a mi casa. Era un local de bebidas bastante cutre y antiguo, pero me agradó nada más entrar. Estaba vacío, así que en cierto modo me sentía algo más cómoda que si hubiese demasiado gente.
Camarera: Hora, guapa. ¿Qué te pongo?
Annthea: Esto… Hola. Pues no lo sé, es la primera vez que vengo por aquí… ¿Qué debería tomar?
Camarera: Puedo recomendarte mi cóctel estrella si quieres, aunque no es para novatos ^.^ *Agarra las cosas para hacer un cóctel* ¿Eres nueva en la ciudad, monada?
Annthea: Si, me mudé de Moonlight Falls hace una semana *La camarera le acerca un cóctel rosa y ella lo coge*
Camarera: ¿Moonlight Falls? Oh, un par de clientes me han hablado de ella. Magia por todos lados, ¿eh?
Annthea: Exacto. No me molestaba, pero era irritante que todos pensaran que tienes magia solo por tener el pelo blanco *Pruba el cóctel* ¡Eh, esto está muy bueno!
Camarera: Ten cuidado, te dije que no era para novatos… Bueno, si te soy sincera, también pensé que eras maga o algo. Los otros clientes que me hablaron de ese sitio también lo eran. De todas formas, maga o no, tienes un color de pelo precioso, guapa *Guiña el ojo*
Annthea: *Se sonroja* G-gracias. Oye… ¿Esto no tendrá ninguna clase de origen animal, no?
Camarera: No te preocupes, nena. Es completamente vegetal –
Y alcohol-
No recuerdo claramente toda la conversación. La verdad es que la camarera tenía razón, ese cóctel no es para novatos. Y yo era una completa novata en esto del alcohol.
Annthea: Y-y esta estoy sola… No tengo ningún amigo… ¡Quiero amigos a los que querer! ;o;
Camarera: Monada, creo que lo que necesitas es un polv… Quiero decir, un novio…
Annthea: ¡No…! ¡Hombres machistas! ¡Malos…!
Annthea: Ugh… Me siento mal… Creo que me voy a casa…
Camarera: ¿Estás segura? o.o’ Puedes quedarte un rato a que se te pase si quieres…
Annthea: Si, segura… Puedo pedalear hasta casa yo sola…
Pero no, no pude. Nada más salir del local, caí completamente inconsciente. Simplemente, creo que mi cuerpo no aguantó esa concentración de alcohol.