Hum! pues... a mí, en plena adolescencia (lo peor xD!!) me afectan que no veais los cambios hormonales... la madre! hay veces que me cabreo por nada y, aunque ya lo haya reconocido para mí misma, soy muy cabezona y me cuesta reconocerlo ante la persona con la que me he cabreado... para esas ocasiones tengo preparado al señor hipopótamo xD!. Es un peluche con el que pago las broncas (ya tiene descosida la pierna
, en serio, probadlo, desahoga muchísimo y no se queja, jiji). También hay veces que lo pago con las puertas (por lo que mis padres me regañan y me cabreo aún más xD). Resumiendo, que se me pasa dándole una leche a mi peluche
... aun así, lo que más me calma es hablar con mi madre de lo que ha sucedido, porque te sabe escuchar y es muy pacífica, realmente me hace sentir bien.
Edito: con mis amigos casi nunca me enfado... de las pocas veces que lo he hecho enseguida empezamos a decir tales chorradas, que acabamos riéndonos (o llorando xD!).