por fin puedo actualizar XD, ya tengo la historia algo avanzada y quiero subir los que me faltan
bueno aquí dejo el 5to. y gracias eli por pasarte a mi desierto blog XD!! un beso!
ah!!! importante: voy a agregar la sinopsis al primer post por si alguien quiere saber mas o menos de que va la histroia jeje.
Capítulo 5: El Guía de los sueños (parte 1)música:
"i remember you-yui"Al salir de todo el humo de la gran ciudad, Shin y Tunder me llevaron hacia una camioneta muy bonita, las cosas allí eran muy similares al Nisshoku pero de una forma más futurista. Si bien nuestro estilo de vida es más tradicional teníamos conocimiento de como funcionaba todo en el mundo humano, quizá no tanto con las tecnologías. De todos modos, gracias a mi hermano podía estar al día de lo que pasaba fuera del bosque tan apartado.
Llegamos hacía una cabaña, estaba debajo de un enorme puente lleno de luces en los costados
-¡viejo! ¡Bájale al televisor! ¡Te tenemos una sorpresa!Shin gritó hacia la puerta agitando sus manos
En verdad sentía gran alivio de que hallara a alguien tan pronto en medio de aquel callejón lleno de objetos oxidados y rotos. Además tenía la esperanza de que aquel “viejo” pudiera ser un hechicero que conociera los portales y así regresar a casa.
-¡niños! ¿De vuelta en la ciudad?- un hombre de cabello rubio y anteojos de un marco grueso salió a recibirnos, a pesar de la hora no parecía exhausto, con una gran sonrisa saludaba
- ¡No saben cuanto me alegra! pero ¿podrían golpear la puerta como lo hacemos las personas normales?-¡bah! Seguro estas de mal humor por el partido de los llamas-respondió Shin
- créeme que yo también estoy cabreado ese Hoff no puede hacer un buen tacle ni usando esteroidesMientras ellos charlaban, Tunder me explicaba que aquel señor era quien les había dado hogar desde su adolescencia cuando formaron su grupo de música en Bridgeport, supuse por el nombre tan raro que era esta ciudad
-¡viejo!-Tunder me tomó de los hombros parándome frente a él
-¡ella es mi nueva conejita! Aún no le he puesto nombre pero ¿a qué es muy bonita?“De nuevo con ese apodo”-otra vez este niño tomando a todos por mascotas- me observó detenidamente
- niña tu apariencia es muy peculiar, dime ¿también estas en busca del estrellato como estos dos? Tímidamente me volteé hacia Shin, en cierto modo sentía nervios, nunca le había hablado a un hechicero antes ni sé qué formalidades debía utilizar en su presencia, aunque ellos lo trataban con toda familiaridad
-Vamos no tengas miedo- me dijo
-tendrá cara de gruñón pero se comporta como todo un padre medio chiflado-No me definía de esa forma, pero gracias Shin-La hallamos muerta de frío y en plena lluvia cerca de los almacenes-agregó Tunder
- pero como caballeros que somos la rescatamosComo pensé, aquellos dos eran hermanos aunque no compartían rasgos faciales pero quién soy yo para hacer ese tipo de observaciones, lo único que teníamos en común con Kenji era la forma de los ojos con un color intenso, una pupila diminuta y luego la piel sumamente pálida, nada más. El hombre puso una cara de espanto y con tono preocupante se dirigió a mí
-¿en los almacenes? ¿Qué no sabes que es muy peligroso andar por ahí pequeña?-obviamente no- contestó Tunder
-¡que pregunta viejo! Te decimos que no tiene a donde ir, es más es como si no supiera en qué mundo vive“exacto” repliqué por dentro, supuse que ya había estado mucho tiempo en silencio y después de todo era de mí de quién tanto preguntaban, si no decía algo pronto temía que terminaran por devolverme al callejón
-esto…-trataba de acomodar mi voz temblorosa
-mi nombre es Layla, sé que mi hogar está muy lejos, pero es lo único que pudo hacer mi hermano Kenji para protegerme de los cazadoresDe pronto tuve muchas ganas de llorar, recordar esa última imagen destrozaba mi corazón
-ahora que lo recuerdo, nos habías preguntado si éramos cazadores, pero creí que era una broma- dijo Shin
-¿entonces alguien te busca? ¿Por qué tu hermano no vino contigo?“si tan sólo supiera” -esto es más serio de lo que pensamos-Aquel señor se acomodó el sombrero que llevaba inclinándolo hacia atrás para poder ver mejor, sus ojos eran de color esmeralda al igual que el príncipe del cuento, brillaban mucho a pesar de estar detrás de un cristal.
-si no te molesta te puedes quedar aquí-continuaba
-he vivido durante años en esta ciudad, mi casa se ha convertido en un albergue de jóvenes que buscan el estrellato como estos dos-woahh recuerdas bro, era cuando entramos al equipo de fútbol americano en secundaria-Tunder miraba al cielo como si hubiese sido hace mucho tiempo
-¿entonces te quedas? Te aseguro que estarás en muy buenas manos-Shin me sonreía y provocó que yo también lo hiciera
-muchas gracias, de verdad se lo agradezco- sentí una lágrima escapándose de mis ojos, podría ser de tristeza o felicidad aún no estaba segura, por un momento aquella escena se pintaba como las familias de cuento
-por cierto soy Abrham-dijo estrechando su mano suavemente con la mía
Entré en silencio a la cabaña, los muebles eran de madera, y había fotografías de paisajes por doquier, me recordaba a mi hogar sólo que las habitaciones se extendían varios metros más.
El señor Abrham buscó unas ollas en la alacena y notó que mi curiosidad me tenía inmóvil
-lamento que a este lugar le falte el toque femenino-por fin encontró un bol grande y una cuchara de madera-no habitó ninguna mujer aquí desde hace ya tiempo y soy muy malo escogiendo adornos y combinando las cortinas
Reí tímidamente, Ken igualmente solía decirme que no tenía buen gusto para la decoración pero como sabía que yo amaba las rosas lo hizo muy temático.
-¡genial! ¡Eso significa que me la puedo quedar!-hermano, ya para con eso de decirle conejo, me asusta que pienses que en realidad lo es-Shin tomó el frente de su gorro y lo tiró hacia abajo, dejando el cabello de Tunder cubriéndole los ojos
-¿qué? No seas tonto Shin claro que sé que no es un animal-el muchacho volvió a acomodárselo
-pero su pelo es tan esponjocito y blanco además de que toda tímida se me hace muy tierna ¿a ti no?-bueno… sí-cuando había que hablar de chicas esos comentarios lo sonrojaban
-pero me preocupa eso de que la están siguiendo, ¿crees que alguien la quiere asesinar o algo así? Que tal si su hermano no se salvó y por eso se la ve afligida-puede ser…-serenó un poco su enérgica voz
-pero ya nos lo dirá a su tiempo, ahora que está con el viejo dudo que corra peligro, además él es del tipo de persona que sabe escuchar y logra que otros le tengan confianza, no tardará en dejarse ayudar- entonces podemos estar tranquilos quien sabe, podría ser nuestra nueva hermanita- Tunder vio cerca de un árbol su viejo balón de futbol
- mira bro! Sigue tal y como lo dejamos
-nuestra hermanita-suspiró
- suena bienDurante varios minutos estuve sentada en una silla cerca del señor Abrham, su cocina lucía realmente hermosa hasta de lejos observé un juego de té qué aparentaba haber estado ahí un largo tiempo, llevaba grabados de flores y casas de campo.
-disculpe…-aún me costaba dirigirme hacia el
- ¿necesita ayuda? A decir verdad no tenía amplios conocimientos de recetas, pero ya estaba recibiendo más de lo que podía pedir.
-todo en orden campeona-contestó sin siquiera voltear y batía mas fuerte, presentí por su tono que sonreía
- tú ponte cómoda, vas a probar mis famosas tortitas de mora-¡como si supieras hacer otra cosa viejo!- los chicos entraron acomodándose a ver televisión en el enorme sofá de la sala
-Llamas vs Avispas, esto se pondrá bueno-¿y esa formación?- si es la misma del partido anterior, van a volverse demasiado predecibles-posiblemente- Shin se tornaba pensativo
-al menos Hoff está en la banca, espero que se quede ahí-¿pero qué dices hermano?, su defensa es mucho mejor que la de los otros jugadores-si, pero no hace un buen pase ni para salvar su trasero -comenzó a reír con malicia
- ¿será que te sientes identificado con eso?-si claro, te olvidas qué en secundaria…-shshshh…-lo interrumpió entrecerrando sus ojos dorados
-ya comienza-ya verás luego-Tunder se hundió en el sofá con un gesto infantil
-está un poco caliente, así que debes soplar un pocoTodo se veía delicioso, aunque estaba un poco quemado en las esquinas, se notaba que había sido hecho con mucho esmero y con ese olor tan exquisito a moras yo no podía estar más a gusto
-está rico- dije sin levantar mucho la vista
-gracias, al parecer aquellos no son tan amables como tú -me llamaba la atención que no se quitara el sombrero, había libros de vaqueros que tenían personajes como así y siempre eran los héroes de la historia, continuó hablando mientras enfriaba sus bocados
-entonces, ¿vienes de muy lejos linda? -de la región del Nisshoku-respondí por lo bajo- más preciso en una aldea del límite Amanecer... pero yo vivía en el bosque sola, y todos los días me visitaba mi hermano
-¡¿tu sola en un bosque?!¡Pero si eres muy jovencita además de ser una dama! ¿Por qué no vivían en tu…aldea?-eso ultimo lo pronunció con desconfianza, no estaba segura de los términos que usaban en este mundo, Kenji decía que no eran los mismos que allá
-el sí vivía allí-movía en círculos el tenedor alrededor de mi plato
-pero yo no tenía permitido acercarme, él fue quien me crio y educó desde que tengo memoria y me llevó al bosque para que no me dañasen-que horror, pero ¿dónde está tu hermano ahora?Sabía que era de mala educación no contestar su pregunta, pero la angustia que me provocaba recordarlo me enmudecía y sólo apretaba mis labios haciendo por lo menos un esfuerzo de seguir hablando
Para mi alivio, el sr. Abrham se levantó extendiendo su brazo hacia mí
-lo siento pequeña, te he estado interrogando y olvido que todavía estas toda empapada, si que llovía afuera ¿verdad? , iré a buscarte un poco de ropa que dejaron los chicos aquí cuando eran niños, supongo que te quedará bien.Lo tomé de la mano y me llevó por una escalera en forma espiral, debajo de la cocina había un cuarto con varias cajas y carteles pegados en la pared. Se veía muy acogedor, aunque la expresión de él no era muy grata
-ay cielos…-suspiró-este lugar es un desastre…-esta bien…-me apresuré a decir
-es una linda habitación, se parece mucho a mi cabañaNo estaba mintiendo para nada, yo ni siquiera tenía la cocina separada del dormitorio, además los cuadros y fotos le daban ese relleno a las paredes vacías que a mí me costaba lograr.
-prometo ir arreglando esto-aún sonaba algo avergonzado
-es que los últimos que habitaron fueron los muchachos y les daba igual como se viera.Ya que no pude calmarlo ni hacerle entender que todo lo que estaba pasando era un milagro para mí, le dediqué mi mejor sonrisa; en realidad si era como un padre de esos que siempre soñaba tener.
-ahora ve a darte un baño, te dejo la ropa sobre aquella cama, para que puedas descansar luego-si, muchas gracias-hice una reverencia
-ni lo digas pequeña debes estar agotada por tanto viaje-tomó una toallas que estaban encima de la lavadora y subí las escaleras yendo detrás de él.