bien!! ahora si, vengo a subir e.e les recuerdo que Kyuenray es como se le llamaba a la rosa blanca del nisshoku, y que significaba un "vacío", también es el título del libro donde la leyó darius la primera vez XD
nada más. espero que les guste n.n
Capítulo 6: Lazos ocultos del KyuenrayAmbos se apresuraron a llevar a la pálida chica de regreso a casa, bajando hacia el sótano Tunder la tomó en brazos acomodándose junto a la cama, su preocupación crecía a medida que pasaban los minutos sin que ella despertara
Shin por su parte no lograba contactar a Abraham, conformándose sólo con su molesto todo de espera
-el viejo no contesta, será mejor que lo vaya a buscar avísame si abre los ojos ¿de acuerdo?-entendido bro, pero ve rápido…ya no se siente tan cálidaMarchó por la puerta haciendo rechinar sus zapatos por el agua del mar, sin la camioneta se tardaría por lo menos una hora en ir hasta la casa del hijo de Abraham
Tunder, milagrosamente se quedó en silencio repitiendo “conejita despierta” y meciéndola un poco hasta que por fin abriera los ojos, dibujando de pronto una sonrisa en él
-¡¡conejita!! Casi me matas del susto, me hubieses avisado si te sentías mareada-¿Tunder?-si soy yo, el de pleo castaño, que tiene alergia a los animalesDe a poco seguía levantando la vista hasta estar a la par de esos verdosos ojos, lo último que recuerdo es el fuego desvaneciéndose, y luego…nada. Aunque estoy muy contenta de despertar en brazos de Tunder y no en los de un cazador.
Miré mis mangas cubiertas por una estampa de adorables patitos, él siempre escoge cosas con animalitos al parecer, me apena tanto el tema de su alergia, es como cuando yo quería ir al mercado de la aldea y Kenji no me lo permitía aunque fuera por mi bien
-¡Descansa aquí! Iré a avisarle a Shin que estás bien-¿Shin? ¿dónde está?-fue a buscar al viejo, nos preocupamos de que tuviéramos que llevarte al hospital y no tener la camioneta-lo siento mucho, no se que pasó , no quise…-jaja, siempre disculpándote conejita, no has hecho nada malo. –dijo mientras se alejaba de la cama -
¡ah! ¡Y debo entregarte tu regalo!-¿mi regalo?- me pregunté si se refería a la ropa, me apené pues no se que expresión dar ante tanta amabilidad…
Que me haya desvanecido de esa forma, sólo puede significar una cosa. Aunque las rosas blancas crecen en invierno, todo lo contrario pasa en este lugar, es como si fuera la estación cálida
En cuestión de segundos regresó con algo entre manos y una agitada sonrisa
-¡taraaaaaan!Acomodando sus patitas para que se viera sentado frente a mí, colocó al cachorro de peluche, yo no dejaba de mirar sus largas orejitas, mi oso Uki del Nisshoku, las tenía muy cortitas. Parte de mi dificultad para dormir se debía a que no lo tenía cerca.
-¡que precioso! ¿Cómo se llama?-tu dime- respondió con una sonrisa
-ahora te pertenece-¿de verdad?- le dí un gran abrazo al animalito de felpa
-gracias! Muchas gracias! ¿Pero por qué? ¿cómo sabías que me gustaban?Ese tierno cambio se su mirar, se me hizo distinto a otras veces, puede que haya dicho algo que no debía. Suspiró un momento y apartó su rostro hacia un costado
-creí que te sentirías sola, comprendo lo horrible de perder a tu familia y sobre todo a un hermano que te protege sin importar las circunstancias-Shin parece ser un buen chico…-no…no lo digo por él, nosotros no somos hermanos, somos amigos de la infancia. Mi hermano vivía en Nueva York …en realidad ambos vivíamos ahí. Nos cuidamos uno al otro desde la muerte de nuestros padresMis lágrimas no se contenían, sentí alguna mojar mi mejilla ¿cómo una persona que había sufrido tanto podía estar sonriendo la mayoría del tiempo? Me hizo reflexionar, y pensar que mis emociones estaban un tanto exageradas
-bueno eso y…- volvió a tener su tono de voz animado
-por mi alergia, si no puedo tener animales de verdad me conformo con uno de juguete jeje, desarrollé un buen gusto para escoger peluches-Tunder…-lo abracé esperando que nunca mostrara esos ojos melancólicos de nuevo- estoy rodeada de personas fuertes, algún día yo también lo seré
¡¡¡LAYLAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!Ambos nos pusimos de pie al escuchar el ensordecedor grito
Era papá el que bajó tan rápido las escaleras que su sobrero casi vuela
-¡Layla, mi pequeña Layla! ¿estás bien? ¿comiste algo?- puso su mano en mi frente para verificar la temperatura-no tienes fiebre…¡pero estás fría!¿con este calor? ¿Cómo es posible?-¡oye tranquilo viejo!¡la vas a ahorcar! Esta sana y salva mírala-Shin intentó calmarlo-¿en verdad dices que está fría? Eso es raroNo terminaba de entender el por qué les parecía raro, en esta estación…
-es por que ya casi es invierno- me animé a decir, aunque ellos se sorprendieron aún más
-¿invierno? Pero si es verano pequeña-…oh…¿aquí es verano?-hice señas cruzando mis manos
- ¡si, si, claro! Es verano, que tonta…No quise seguir el tema , puede que por hablar tanto termine metiendo la pata
-Viejo, la llevarás con nosotros a la estación ¿verdad?- ¿por qué van a la estación?- pregunté temiendo lo que luego escucharía de la boca de papá
-bueno, esta noche los chicos parten de nuevo a su ciudadEstación del Subterráneo-Promete que darás de comer a Sabrina y que cuando encuentres un nombre para tu perrito me lo digas por teléfono- por poco parecía que Tunder rompería a llorar y por mi parte juntaba fuerzas para no hacerlo, apenas nos estábamos conociendo y ya debían partir
-aléjate del sol y toma mucha agua ¿de acuerdo?-si-contesté sollozando un poco
-vamos a extrañarte mucho Layla, cuando terminen las giras volveremos a la playa a seguir practicando pasesDifícilmente pude alejarme de aquellos brazos, sus chaquetas de tan vivo color se iban arrimando lentamente a las puertas del subrterráneo
Tunder seguía con expresión triste y algo negado a querer irse, Shin hizo una pequeña reverencia. Así dejé de verlos por un tiempo, deseaba que no por mucho. Había tantas cosas por saber de ellos y compartir otros momentos como el de la playa
Papá lanzó una carcajada, palmando mi hombro
-en menos de lo que piensas los tendremos mirando fúbol américano en el sofá de casa-si…-bien pequeña ahora vamos a nuestra siguiente parada, te lo explico en el caminoPapá dijo que su trabajo lo hace viajar por muchas partes del mundo, tiene una dedicación a su trabajo que hace que su teléfono celular se llene de llamadas por parte de investigaciones y estudios internacionales
En unas horas su vuelo a Italia me dejaría otra despedida en el corazón, ante mis miedos de perderle me calmó advirtiéndome que no estaría sola sino que por una semana iba a pasar mi lamento de no verlos en casa de su hijo.
Me daba curiosidad, esa persona solitaria y de carácter alterado no me daba una buena impresión pero aún así algo me encendía ilusión por dentro
-¿Tunder te lo obsequió?- refiriéndose al peluche
-ese chico, aunque parezca un despistado presta más atención de la necesariaCentro de Bridgeport-¿hijo?-“sube”-yo no puedo, mi vuelo se atrasa. Le dije al encargado que subiera las maletas espérala en la puerta-“¿Qué soy? ¿su maldito mayordomo? Dile el número de puerta y que golpee”-ten cuidado con esa actitud muchacho, esta me la debes-Layla…-¿si?-al notar que terminó de hablar por el aparato me levanté del sitio
-no te asustes si Darius se pone…mezquino ignóralo, cuesta que tome confianza-¿Darius?-recordé que jamás lo había mencionado
-oh cierto no te había dicho su nombre, ya comienzo a entender el por qué me dicen viejo…, en fin dulzura-si hay algún problema, puedes llamarme a mi o a los muchachos. Que pases una linda semanaNo se que haría siete días sin esos abrazos y esa risueña expresión bajo su sombrero
-lo haré, cuídate mucho papá, te estaré esperandoUn simpático hombre que hacía sus tareas en el edificio, me ayudó con mi equipaje, al subir al ascensor solté un quejido, la sensación de que todo se movía me asustó bastante
Al salir en el piso indicado, hallé la puerta de madera resquebrajada. Mis ansias de conocer a aquella persona de la que hablaba papá crecían al igual que los latidos de mi corazón
Música: "spice of life"Golpee cuidadosamente, aunque del otro lado un sonido de guitarras muy potente me sugirió que lo hiciera con más fuerza esta vez
-¡Aaron! Carajo levántate ya, llegó la chica-¿qué? ¿quién?-maldita sea, no quiero que te vean durmiendo en mi casa todo el tiempo pensarán cualquier cosa-¡pasa!La música estaba demasiado alta como para que Layla lo oyera
-¡que pases! ¿qué está sorda?Caminó a paso violento, sus ojos esmeralda se tornaban casi rojos de furia como su cabello
-¿no escuchaste? ¡Te dije que….…pasaras-ay no…Como si no fuera suficiente llegar agotado de horas y horas de ensayo, y estar convencido totalmente de que esa tontería del libro no fue más que un delirio de su aturdida mente
Aquella niña de cabello blanco que creyó ver antes, no era una simple ilusión. Pero más que eso ¿ahora la tendría viviendo en su casa?
-no, no,no,no….¿que mierda es todo esto? Tu…no existes….¿esto es una broma?En la desesperación tomó del brazo a aquella muchacha, pensando al tiempo que un ser irreal no podría tocarse tan fácilmente
Corrió hacia la sala donde Aaron seguía desperezándose
-¡Aaron!-¡ya…ya me estaba levantando! ¿Ya llegó la mujer…es sexy?-olvídate de eso…¿dime que ves?El muchacho de cabello azulado no asimilaba el espanto de su amigo, se volteó a ver a su nueva huésped aunque en lugar de una mujer sexy se encontrara con una jovencita de todos modos la recibió con entusiasmo
-¡wow! ¡Pero qué cabello! hasta parece que fuera blanco natural-miró a su compañero quien estaba hirviendo-
¿Qué tiene de malo? Será una niña pero es muy bonita“entonces, si puede verla” se dijo a sí mismo
-Aaron, ve a tu casa y dile a las chicas que luego me aparezco por allí -entendido mi capitán, pero no te pases ¡eh! Que es muy pequeña aúnLayla sólo se mantenía en silencio, escuchando las voces a su alrededor, supuso que Darius era el pelirrojo con mirada penetrante y fija en ella desde que la vio
-Tú no te preocupes, tiene mal carácter cuando no come es todo un lobo feroz, pero en realidad es un cachorroLe guiñó un ojo, para hacerle entender que pasaría por más de estas actitudes de su compañero más tarde. Se alejó por la puerta algo risueño, dejándola en medio de la sala como si fuese un maniquí de escaparate
-hmm-ahora estaba sola cara a cara con ese hombre que por alguna razón no le daba confianza
Por un momento quiso creer que era su príncipe, pero su mirada y esos brazaletes espinados alejaban la imagen de un noble a kilómetros de su esperanza.
-yo…mi nombre…es Layla, estoy encantada de conocerteMúsica: "strawberry ost"-no hables-¿eh?....pero…-te dije que no hablaras, si hay algo que me molesta son las niñas mimadas como tu que huyen de su casa solo para hacerse famosas-te equivocas…yo no quiero ser…Un par de manos bruscas rodeando sus muñecas la silencio, el miedo le hizo acceder a callarse al fin. Ese joven podría ser otro más de los que odiaban a la rosa blanca y la situación se pintaba tristemente como aquella vez junto al lago
-¿¡entonces por qué estas aquí!?¿me estas siguiendo?-¿quieres algo más? ¡Te he visto antes, no te hagas la desentendida!, incluso te atreviste a jugártelas con mi padre para venir aquí ¿no es cierto?-no…-Layla intentaba apartarlo, pero su fuerza no se comparaba, la tenía totalmente acorralada contra la pared, y las tachas de los brazos de Darius le raspaban
-por favor…suéltame Un rugido interrumpió tan tensa situación, de pronto Darius se alejó de la muchacha ruborizándose de a poco
-esto…¿tienes…hambre?El no contestaba simplemente apartaba la mirada hacia un costado, justo en ese momento su estómago lo delató quitando toda seriedad en sus palabras, al menos pudo calmarse un segundo.
-¿quieres que haga algo de comer? No se mucho… pero.. puedo…-no te molestesCaminó hacia el pasillo sin levantar la vista
-si tienes hambre toma algo del refrigerador, ni se te ocurra entrar en mi habitación lo tienes prohibido-¿A dónde vas?-preguntó con su voz suave y temblorosa
-por ahí, no te incumbeEl gruñido lo siguió hasta fuera del apartamento, esperando a que el ascensor llegara un hueco de reflexión le llegaba a la mente
-me pasé un poco…pero mejor que se mantenga apartada de míDecidió pasarse por casa de Mica, aunque la culpa lo hacía pensar que ya la tomaba como sillón confidente aguantándole sus tonterías
Mientras tanto Layla intentó olvidar el mal rato, estando sola se le haría más sencillo entender todo lo que estaba pasando. Dejándo sus maletas en un lugar donde no estorben, se puso su pijama de gatitos que Tunder eligió para ella y se ató una cola de caballo para sentarse en el sofá y ver el canal de cocina, puede que para calmar los nervios de Darius la solución sería cocinarle algo
En la tv“y voilá! Un pastel que usted mismo puede hacer con pocos ingredientes y para cualquier ocasión: un cumpleaños, un aniversario o quién sabe sorprender a un ser querido”-¿un pastel?...¡eso es! Kenji adora los pasteles y Shin las tartas de lima-Ahora me queda averiguar de qué podría gustarle a Darius…¿será de chocolate? Todo el mundo adora el chocolateSu sonrisa se hacía inmensa solo de imaginar lo bien que se sentiría aquel muchacho con su postre preferido. Layla acostumbraba a agradecer a las personas con su don especial al adivinar los platos preferidos de cada uno. En el Nisshoku, a los hombres se los considera buenos cocineros por lo que su hermano se encargó de quitarle sus ansias de aprender.
Se dispuso entre mezclas preparar un gran pastel que le cambiara su primera mala impresión sobre ella, sería más en modo de disculpa, aunque no tuviera por qué asumir culpas. Buscó en su equipaje unos chocolates que guardaba para después
Luego de un par de horas batiendo con un cucharón de madera, se posó junto al horno a cada momento esperando que no se estropeara ni quemara
Horas despuésDarius no había recibido consuelo ni en las calles ni en Mica. Pasó por el bistró más barato que pudo encontrar, esa noche estaba tan agotado que ni ánimos tuvo de visitar el
“Anima’s Rocks”.-¿dónde se habrá metido?¿y ese olor?Deleitado por un aroma que parecía ser chocolate, entró en la cocina dudando de lo que se encontraba allí, hasta que vio sobre la mesada un pastel recién hecho, decorado humildemente con un par de flores amarillas
-
¿ella hizo esto? –con un dedo quitó un poco de la cubierta y lo llevó a su boca
-está loca…Música: "Wherever you are"Con un tenedor en mano, llegó hacia la mesa dando una barrida con su brazo a las colillas de cigarrillos que estorbaban. Suavemente cortó un trozo y lo probó un tanto desconfiado
Aunque su expresión luego se dibujara casi como las que solía tener de niño en sus fiestas de cumpleaños, su madre era quien hacía los mejores pasteles que él había probado…hasta ahora.
Enseguida un murmullo y unas vueltas que hicieron rechinar el sofá, mostraban el camino a Darius de dónde se hallaba la niña que horas antes había tendido violentamente.
-Así que aquí estabas…-dijo en voz baja
Perecía tener un sueño profundo, los pequeños rayos de luna colándose por la ventana del piso, llegaban hasta su pálido rostro resaltando aún más la belleza de Layla. Su pelo más que blanco era de un color plata y muy brillante algo que sorprendería a Aaron si supiera que era real. A pesar de acusarla de oportunista, nada en sus rasgos delicados y expresión angelical lo indicaban sino lo contrario.
-¿me equivoqué contigo? ¿no eres una de las “pequeñas zorras” de las que habla mi resentida amiga?- entonces esa definición sonaba ruda y nada tenía que ver con ella, se preguntaba si al abrir los ojos vería ese luminoso halo rosa rodeando sus pupilas
Sintió un inevitable impulso de acariciar su mejilla, jamás había visto tan de cerca una piel como de porcelana, daba a entender que hasta podría romperla, los latidos en su pecho crecían y el remordimiento no dejaba de golpearle la conciencia
“¿le habré dañado las muñecas?...a veces me comporto como todo un imbécil” Observó, la estampa de su camiseta y pantalón, le provocaba aún más ternura que el simple hecho de tenerla durmiendo en su sofá en esa posición
-vaya ropa de dormir trae puesta…¿en verdad tiene casi mi edad?Sin obtener respuesta alguna de Layla, por su sueño profundo asumió que se había esforzado bastante, todavía le quedaban restos de harina por toda la cara y por sus pequeños y finos dedos
-Aquí no dormirás bien…pero que este sea nuestro secreto, no dejo que nadie entre a donde te voy a llevar…Darius
Si mi papá me hubiese aclarado que de momento me encontraría a una muchacha de apariencia tan extraña…bueno en primer lugar es algo estúpido imaginarlo. Hace día mi alma tiene una duda existencial que pocos considerarían dentro de los límites normales. Odio tener que preguntarme en todo momento ¿quién demonios seré? ¿qué es lo que me falta? ¿por qué antes me sentía tan vacío y ahora ella aparece frente a mi…y toda ese mar de interrogantes se me hace tan leve.
A veces tengo sueños extraños, con un lugar muy distinto al que, desde que tengo memoria, recuerdo habitar. Es inmenso mi deseo de darme una golpiza ahora, todo el tiempo insultando a las personas prejuiciosas y me he vuelto una de ellas en un tonto forcejeo
De todas formas no voy a dejar que te ganes mi confianza tan fácilmente, aún te desconozco, desconozco de dónde vienes y por qué estás aquí, el por qué tu apariencia es tan similar a la de una doncella. ¿es posible que seas la chica del cuento?
¿es posible que en una vida anterior te haya conocido? Sé que estoy delirando y puede que este sea un sueño más. Ni siquiera deberías estar en mi cuarto, hay demasiados objetos aquí que no puedo dejar que nadie vea
Si esto es un sueño, tu…
En la mañana…y por el resto de mi vida…
No volveré a verte jamás