gabriely99 escribió:La historia te envuelve y al mismo tiempo que es muy intrigante logra dar la informacion justa
Me encanta
Me alegra que te guste. Espero que la sigas y me des tu opinión
Traigo otro capítulo, en este caso uno bastante completo con respecto a la temática central de la historia, en realidad solo quedan este capítulo y el siguiente de lo que podríamos llamar "Temporada" o tal vez "Fase". Aquí se los dejo, gracias a todos los que siguen esta historia.
El Cadáver de la Fiesta: Capítulo V: "Oportunidades"- Muchas gracias de verdad señorita Eyelessbarrow, es un placer conocerla, su libro "La ducha del conejo" me cautivó...
- No hay problema, es un placer saber que mi trabajo le es placentero. -Respondió humildemente Laura a un fan de su literatura.
- Ahora si podemos comer. Es increíble como en todas partes te conocen. -Dijo Zoe.
- Si, debo escribir pronto algo nuevo. Siento que estoy dejando mi trabajo a un lado.
- ¡Vaya! Estas hamburguesas te han quedado increíbles. -Dijo Zoe disfrutando el bocado que aun tenía en su boca.
- Es verdad, ¿Qué les has puesto? -Pregunto Ben fascinado por la comida preparada por su amiga.
- Fue una receta que aprendí mientras estuve por Egipto en un verano, uno piensa que allá no se come esto, pero la verdad es que solo lo comen con algunas variaciones.
- Ahora que estamos aquí. He de decirles algo... He estado tras de una mujer que puede que sepa algo sobre lo que le ocurrió a Demián, creo que ella... Tal vez pueda aclararnos en qué estaba metido. -Indicó Zoe a sus compañeros de picnic.
- ¿Crees que mi hermano estaba en situaciones cuestionables? -Pregunto lentamente Laura.
- Oigan ya hemos hablado de ese tema demasiado estas ultimas semanas. Por esta vez, solo disfrutemos del paseo, relajémonos. Creo que a Laura este tema ya le incomoda, y de no ser así pues a mi si. -Dijo Ben interrumpiendo.
- No me incómoda, más bien debo agradecerte Zoe por todo lo que has investigado, ya que me interesa mucho saber que has descubierto.
- Si eso lo sé Laura. Pero creo que será mejor que hablemos de esto cuando tenga algo en concreto que decirte. -Indicó Zoe.
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- Veré que información logros obtener en el sitio del crimen.
- Sí, es indudable. Allí está quien puede reportarme todos los detalles que necesito, el gerente.
- Buenas noches señor Richteck, soy Mattew Hawk. -Dijo el militar haciendo su típico saludo.
- Buenas noches, claro señor Hawk lo recuerdo de la noche del... Del suceso trágico.
- De no haber sido por usted creo que las investigaciones hubiesen sido más arduas. Fue muy oportuno que usted estuviera aquí en ese momento tan terrible para este club. Digo, tener a un médico y abogado en ese preciso instante hizo todo menos ajetreado. -Señaló el gerente.
- Si, fue muy... Oportuno. -Dijo Mattew pensando en cada palabra, haciendo una pausa antes de continuar.
- He venido... He venido para preguntar por la pianista que tocó aquella noche; ¿Ha venido a trabajar hoy? -Agregó.
- Ah. Muy talentosa ella. No, en realidad no ha venido más. A decir verdad, solo trabajó ese día. Es curioso, imagino que no quería que su nombre fuese relacionado con un lugar donde hubo un asesinato. -Respondió el gerente.
- ¿Y sabe su nombre? Tal vez tenga algún resumen curricular.
- No. Ese documento desapareció; intenté localizarla para saber si volvería pero ni siquiera encontré su número y su nombre nadie de aquí lo recuerda...
- Interesante. Muchas gracias por su colaboración.
- Quisiera poder ayudarle más. -Dijo el gerente.
- Ya lo ha hecho, feliz noche.
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- Muy bien. Si no logro sacar nada de información de aquí me tendré que llevar el disco duro entonces...
- Ya casi, ya casi... Vamos Zoe, lo tienes.
- Disculpe, ¿Qué hace en mi oficina? ¿Trabaja usted aquí? -Preguntó confundida la médico que entró en el despacho.
- Eh, yo... -Respondió Zoe sorprendida.
- Usted es Romina Zapata. Mucho gusto. -Dijo Zoe.
- ¿Nos conocemos? No lo creo, si fuese así la recordaría.
- Puede considerarme su amiga, dependiendo de la información que esté dispuesta a darme.
- ¿Sobre qué? -Preguntó Romina.
- Sobre Demián Eyelessbarrow.
- No tengo por qué hablar con usted. Además, nunca había oído ese nombre. -Señaló Romina.
- Eso es mentira. La verdad es que esta conversación no es una opción. Sé que estudiaron juntos en la universidad de ciencias de la salud. -Aseveró con firmeza Zoe.
- Es cierto, pero tengo años sin saber de Demián... -Respondió nerviosamente Romina.
- Eso tampoco es cierto, el día de su muerte se registraron más de 50 llamadas entre ustedes dos.
- Yo... Yo... No creo que este sea el momento adecuado para hablar de esto... -Dijo Romina sin saber qué añadir.
- Pues este para mí es el momento. -Indicó Zoe rigurosamente.
- Le seré sincera. Este no es el momento ni el lugar. Por lo que veo, usted es la persona indicada con la que debería hablar. Pero estoy de guardia durante 2 días, le prometo que cuando salga del trabajo nos encontraremos en el parque central, debemos hablar.