Uff, que cómo conocí a los sims... Os tendréis que preparar para otro rollo de los míos, porque me acuerdo perfectamente.
Descubrí la saga de los sims bastante tarde, y comenzé a jugar al primer juego cuando ya habían salido Los Sims 2 y la mayoría de sus expansiones. Todo empezó un día que por la tele salió un anuncio de algún juego de los sims, no recuerdo de qué plataforma, aunque supongo que serían los sims 2. El caso es que al verlo, mi padre dijo: "¡Yo tengo ese juego en el móvil!", a lo que contesté, obviamente, "A ver? ¡Oh, déjame jugar!". A partir de ahí me vicié con la versión móvil de los sims, lo que hizo que mi madre recordara que tenía la versión PC en alguna parte, se la había dado una amiga del trabajo hacía tiempo en evento de algún cumpleaños o algo así. El caso es que ella sólo había jugado una vez, porque según ella "su sim se murió en la bañera" y se llevó un disgusto lo bastante grande para desinstalar el juego. Con la información que me dio en su momento y los conocimientos que luego adquiriría, he concluido que lo que de verdad pasó fue que dejó al sim bañándose, tocó algo para dejar las paredes completas, y al no poder dejarlo como estaba y ver a su sim, éste murió de hambre.
En fin, que ya nos ves buscando el disco en las profundidades del armario del cuarto del ordenador. Finalmente lo instalamos (con ayuda de mi padre, que por aquel entonces éramos muy novatillas) y conseguimos que funcionara.
El primer ratito que jugué fui a la casa de los Novato (que por algo eran el tutorial) y estuve un poco con ellos, lo bastante para cogerle el tranquillo a dar órdenes a los sims. Como coincidió que era el día de Reyes y teníamos otros compromisos, pues no tuve mucho rato para jugar y no empezamos "en serio" hasta aquella tarde-noche. Primero se puso a jugar mi madre, conmigo mirando, y cogió a un sim del cajón (Miguel Soltero) y lo instaló en una casa. Nos las apañamos para comprarle cuatro cosillas y buscarle un trabajo, y vino a visitarle Elvira Lápida, a la que entonces no conocíamos de nada, y lo que nos llevó a un intercambio tal que así:
Yo: ¿Quién es esa?
Mi madre: ¡Yo qué sé!¡Me he quedado un momento mirando las cosas que había comprado y se ha colado ésa tipa!
Aparte de eso, aquella primera vez jugando fue bastante caótica. Controlar las necesidades de nuestro sim no se nos daba muy bien, y para colmo en cuanto intentó cocinar algo se prendió fuego el horno (en ese momento Elvira tomó las de Villadiego, muy oportunamente) y para entonces yo ya estaba diciendo: ¡Deja que se muera, empezaremos otra vez! y mi madre no lo quería matar. En algún momento nos iluminamos y decidimos ver si podía pedir ayuda mediante el teléfono. El problema fue el sistema de llamadas que había: te aparecían los apellidos de las familias, y luego, si hacías click en ellos, los nombres de cada uno. Así, le dimos al teléfono y vimos "Lápida". No teníamos ni idea de qué era eso, y dimos por supuesto que el sim estaba ya tan mal que lo único que se podía hacer era encargarle una lápida. En algún momento até cabos y vi que Lápida era sólo el apellido de la mujer que había venido antes. No sé cómo lo conseguimos, pero Miguel sobrevivió a nuestro primer día. Al día siguiente nos encontramos con más problemas, como que el mensajito decía que el coche compartido vendría en una hora pero venía en cinco segundos. Tuvimos que llamar a mi padre para solucionarlo, y él se dio cuenta de que habíamos puesto la segunda velocidad.
Construir nuestra primera casa también fue difícil. No sabíamos como iban las categorías del modo construir, y pensamos que al hacer la casa había que poner una cosa de cada una. Así que hicimos una casa, muy cuadrada y muy grande, y la pintamos, pusimos chimenea... Nos quedamos pobres, (y durante la época de los sims 1 nunca supimos de la existencia de trucos o descargas), y mi sim (Laura, que original
) acabó teniendo sólo una cutre-cama, una cutre-nevera, un cutre-váter y una cutre-ducha. Esto hizo que acabara por salirnos un mensajito de la ayuda del juego, diciendo "¡Pobre Laura, otra vez comiendo de lata!"
Qué recuerdos, los sims 1. Los niños que siempre dejaba que se los llevaran porque eran un incordio (hasta que mi madre me explicó, y eso fue mucho más tarde, teniendo ya las expansiones, que había leído en alguna parte que podían crecer y pasar de bebés a niños si los cuidabas tres días. La primera vez que ella consiguió que creciera uno me despertó aunque era muy temprano, para que lo viese.
), el bug de la bolsa de patatas fritas atascada en el suelo, que había que mudarse de casa para resolverlo (igual se podía haber arreglado con el move objects, pero no sabíamos que existía)... Después, empezó a jugar también mi hermana pequeña. Mi madre intentaba a enseñarla a jugar, y era una risa porque pasaban cosas como ésta:
Mi hermana: ¿Los sims pueden tener bebés?
Mi madre: No, porque un bebé da mucho trabajo y serían muy difíciles de cuidar.
Acto seguido, suena el teléfono preguntando si queríamos adoptar un bebé.
Mi hermana: ¿Y en los sims hay ladrones?
Mi madre: No, porque en el mundo de los sims no hay malos.
Yo: ¿Y si no los hay, por qué se puede llamar a la polícia?
Esa misma noche, le robaron a los sims de mi madre. Se llevaron el juego de ajedrez, que mi madre acababa de comprar después de haber ahorrado mucho, y creo que este suceso todavía la traumatiza hoy en día.
Después de jugar muchísimo con los sims 1 y conseguir todas las expansiones (la primera vez que jugué con expansiones estaba tan viciada que tuvo que recordarme mi padre que ya era tarde y me tenía que ir a dormir) nos enteramos de que existían los sims 2. Estuvimos debatiendo durante un tiempo si deberíamos comprarlo o no, si nos iban a gustar aquellos sims tan realistas, tan diferentes a los nuestros. Al final lo hicimos, y nos enviciamos con aquel juego también. A mi padre le tocaron todas las tareas de instalar, ver por qué no funcionaban (porque nuestro ordenador viejo no daba la talla, claramente), ponernos descargas cuando nos enteramos que existían... Por todo esto aborrece a los sims un poco (pero fue él quién me enseñó los sims para el móvil
), aunque ahora ya me considero experta y puedo apañarme yo solita con todo. Los sims 3 lo tengo casi desde que salió (dos días después, para ser exactos, pero ¿quién lleva la cuenta?) y me voy comprando, más temprano o más tarde, todas las expansiones. Packs de accesorios ninguno, aunque los primeros los veo a veces baratísimos en las tiendas y me tientan. Mi madre y mi hermana todavía juegan, aunque no son tan frikis como yo.
Edito: Menudo santo rollazo que escrito, y encima me he cortado para no aburriros...