Capitulo 3 Anne: Emily, ¿Qué te ocurre?
Emily: Nada.
Anne: Llevas unas semanas alicaída, un momento.-Piensa unos segundos- Desde que se fue el Duque de Crowborough, no volveríais a…
Emily: No, y nunca volverá a ocurrir.-Dice triste-
Anne: Te dije que un Duque jamás estará con una criada, no somos nada para ellos.
Emily: Pero yo supuse que si se casaba con Lady Eliza, yo podría ir con ellos y… No sé.
Anne: Venga anímate, que aún nos quedan dos habitaciones por hacer.-Sonríe-
Emily: No me va a amargar un caradura, venga vamos.-Sonríe-
Edward: El viernes iré a Londres a ver a unos compañeros de mi casa mayor.
Charles: Bien, pero creo que el viernes solo hay un tren de ida a Londres.
Clarice: Yo también tendría que ir a comprar unas cosas para la boda podríamos acompañarte Eliza y yo.
Eliza: Si, hace mucho tiempo que no voy a Londres.
Edward: Por mi bien, si no os importa ir solas.-Sonríe-
Clarice: Edward, no nos va a pasar nada estamos en el siglo veinte una mujer ya puede ir sola sin tener que ir acompañada de un hombre.-Ríe levemente-
Charles: Un momento no planifiquéis tanto, aun no le he dado mi visto bueno.
Eliza: Padre. ¿Qué me puede pasar? Por favor déjeme ir.
Clarice: Charles, no se preocupe no le pasara nada.
Charles: No es ese el problema si no su madre.
Edward: ¿No puede tomar sus propias decisiones sin consultárselo a madre?-Ríe.
Eliza:-Ríe-
Charles: Edward, Eliza no os riais. Eliza tienes mi permiso, el viernes iras a Londres.
Eliza: Muchas gracias.-Sonríe-
Clarice: Eliza, ya verás lo bien que nos lo vamos a pasar.
Clarice: Bueno, ya hemos terminado.-Ríe-
Eliza: Si, me lo he pasado muy bien necesitaba un poco de aire fresco. Llevaba meses sin salir de ese caserón.
Clarice: Pobrecilla.-Sonríe- Aun tenemos una hora hasta que termine tu hermano. ¿Qué te apetece hacer?
Eliza: No sé, podríamos ir a The Berkeley a tomar el té. ¿Qué te parece?
Clarice: Bien, así me iré acostumbrando-Ríe-
Eliza: ¿En América no tomáis te?-Pregunta extrañada-
Clarice: Si-Ríe- Pero allí no es tan ceremonial como aquí y además allí acostumbramos a tomar más café que té.
Eliza: Ah, perdón te habré parecido tonta.
Clarice: No importa yo tampoco se todas las costumbres inglesas.-Ríe- Venga. ¿Dónde está la Tetería?
Eliza: -Sonríe- Al final de esa esquina.
Sr Hayes: My Lady, La Duquesa viuda la reclama en el saloncito.
Daphne: ¿Qué querrá?
Sr Hayes: No se My Lady, esta con un hombre…
Daphne: -¿Con un hombre?, piensa-
Daphne: Buenas, Eleanor.
Eleanor: Buenas, le presento a el detective Daniels.
Daphne: ¿Detective?
Eleanor: Si, ha estado investigando a los Livinson.
Daphne: Interesante. -Sonríe-
Eleanor: Y bueno, Señor Daniel ¿Qué es lo que ha averiguado?
Sr Daniel: He averiguado bastantes cosas pero no creo que sea lo que andan buscando.
Daphne: ¿A qué se refiere?
Eleanor: Daphne, déjame hablar a mí. Señor Daniels le he pagado para que investigase a la familia de la prometida de mi nieto, no para que opine sobre lo que quiero escuchar. ¿Entendido?
Sr Daniel: Si, My Lady. Los Livinson son muy conocidos en Norte América por sus obras de caridad.
Daphne: ¿Obras de caridad?
Eleanor: Querida, ayudan a gente pobre y sin recursos la mayoría casos perdidos.
Sr Daniel: Exacto.
Eleanor: ¿Algo más?
Sr Daniels: Pues, Lady Clarice…
Daphne: No creo que se merezca ese trato.
Sr Daniel: Bien, Clarice tiene un hermano Charlie Livinson que tiene fama de mujeriego y por lo visto no se hace mucho cargo de los asuntos familiares.
Eleanor: ¿Nada más?
Sr Daniels: No, esto creo que les puede interesar. Clarice estuvo prometida pero no llegaron a casarse.
Eleanor: No me diga…
Sr Daniel: Si.
Daphne: ¿Y por qué razón no llegaron a casarse?
Sr Daniel: Por lo visto el chico con el que estaba prometida se sobrepasó con la muchacha.
Daphne: Magnifico, justo lo que necesitábamos.-Sonríe-
Eleanor: Bien, pero si queremos utilizarlo en su contra necesitaremos más detalles.
Sr Daniel: No pude averiguar nada más, pero puedo facilitarles las señas de su antigua doncella.
Eleanor: Si, por favor me será muy útil. Muchas gracias.
Eliza: Si tienes razón.-Ríe-
Clarice:-Rie- Eliza, ¿Quién era ese muchacho al que has saludado antes?
Eliza:-Se sonroja- William Naiper, un amigo de la familia.
Clarice: ¿Nada más?
Eliza: Bueno…-Ríe-
Clarice: Di, somos amigas puedes contármelo.
Eliza: Pues llevo unas cuantas semanas escribiéndome con el.
Clarice: ¿Y cómo es que yo no sabía nada? Estas cosas tienes que contármelas.
Eliza: Me daba vergüenza.
Clarice: Pues que no te de vergüenza, recuerda yo también he tenido tu edad.
Eliza: Si aún sois joven.
Clarice: Ya pero estáis en la edad de la inocencia de enamorarse… Pero no nos desviemos del tema. ¿Os gusta?
Eliza: Si, mucho. Y es perfecto tiene dinero y un título todo lo que a mis padres les importa.
Clarice: Estupendo, y por lo poco que he podido ver es muy apuesto.
Eliza:-Se sonroja y sonríe- Si, tiene uno ojos verdes preciosos.
Clarice: Y a qué esperas. Invítalo a cenar algún día.
Eliza: No sabría cómo decírselo a mi madre y querrá controlarlo todo. Tenía pensado esperar a este verano cuando viniésemos a Londres.
Clarice: Como queráis.-Sonríe-
Eleanor: ¿Qué tal ha ido en Londres?
Eliza: Muy bien.-Sonríe- Fuimos a ver unas cosas para la boda y después fuimos a The Berkeley.
Eleanor: Creia que a Clarice no le gustaba el té.
Clarice: Si me gusta, solo que no estoy acostumbrada.
Eleanor: No estas acostumbrada a muchas de nuestras tradiciones.
Edward: Abuela, ya se ira acostumbrando.-Sonríe-
Charles: Bueno, ¿Entonces bien por Londres?
Eliza: Si, muy bien.
Clarice: Ah, vimos a un tal William…
Daphne: ¿William Naiper?
Eliza: Si.
Daphne: Es un buen muchacho y su familia es una de las más antiguas de Inglaterra.
Charles: Los Naiper, una buena familia.
Eliza: Hablemos de otra cosa.-Susurra a Clarice-
Clarice: No te preocupes.-Susurra a Eliza- Edward, podríamos invitarlos a la boda.
Edward: Si, por que no.
Eleanor: Si solo quedan unas semanas.
Edward: Bueno, se les invitan y si no pueden no pasa nada. -Sonríe-
Eleanor: Y ese Willian Naiper, ¿Os lleváis bien?
Eliza: Si, es muy buen chico. Y… no se lo diga a mi madre pero llevo algunas semanas escribiéndome con él.
Eleanor: Ya, eso tenía entendido.
Eliza. ¿Cómo?
Eleanor: Nada, no importa.-Sonríe- Ya es hora de que contraigas matrimonio.
Eliza: Abuela.-Ríe- Que atrevida te estas volviendo.
Eleanor: No creas querida.-Sonríe-
Charles: Querida, quería comentarte una cosa.
Daphne: Dime.
Charles: Antes, cuando salía de la biblioteca he visto a un hombre. ¿No sabrás quién es?
Daphne: Ni idea.-Sonríe-
Charles: ¿Estas segura?
Daphne: Ahora que lo dices, creo era un candidato para ser lacayo. Pero por lo visto no era adecuado para el puesto.
Charles: ¿Un lacayo entrando por la puerta principal?
Daphne: Como te he dicho no era adecuado por el puesto, ni siquiera sabe por dónde se entra.-Ríe-
Charles: Tienes razón.-Sonríe-
FIN