Siempre es un placer, querido.
Pues el Story Progression a mí, personalmente, me encanta. De hecho, me he acostumbrado tanto a él, que me es muy difícil jugar sin usarlo. La vida de los demás sims del barrio es muchísimo más realista desde que lo tengo. Se enamoran, se casan, tienen hijos, se pelean, se separan, se cambian de casa de forma autónoma y millones de cosas más de una manera mucho más fluida y realista que con el sistema de EA. Además, la vida en la ciudad es mucho más bulliciosa. Ves gente por todas partes, sims que hacen su vida de una forma real, visitando a otros, aprendiendo habilidades, trabajando, entrenando a sus mascotas y, en fin, pues de todo.
Sólo le pongo dos pegas. La primera es el rollo de que te salgan notificaciones informativas cada dos por tres (te informa de todos los sims del barrio). Es un tostón tener que estar cerrándolas constantemente. Además, las notificaciones de mi familia se extravían entre las demás y muchas veces me pierdo información importante. Supongo que habrá alguna forma de desactivar eso, pero yo no la conozco. A ver si algún alma caritativa...
Mi segunda pega es que creo que su funcionamiento no está 100% pulido, aunque no puedo garantizar que el mod sea la causa de los problemas que he tenido. Se supone que hace un reparto eficiente de los sims en trabajos que se ajusten a sus personalidades y en función de la necesidad del juego. Pero recuerdo que en uno de los barrios (Hidden Springs, creo) no generaba bien ni los empleados ni "el jefe" del estudio cinematográfico que puse. Y me produjo unos pequeños problemillas con la sim que tenía currando ahí porque su trabajo requería una buena relación con el jefe y, como no había jefe, el monigote que sale donde el rendimiento laboral siempre estaba enfadado. xDDD
Por lo demás, como digo, no puedo vivir sin él. ¡Se montan unos culebrones en el barrio que para qué!

Edito: He patinado con la explicación. Sí logré que me generase un jefe con la opción tipo "hacer la pelota al jefe", lo que no aparecía eran compañeros de curro.